La asistencia a lesionados en accidentes de tráfico, cuyos gastos asumen las aseguradoras, suponen una importante fuente de ingresos para la viabilidad de centros hospitalarios privados. Tanto es así, que se esmeran en buscar estrategias para captar a estos pacientes. Povisa, por ejemplo, emprendió la campaña publicitaria "A Povisa, por favor" para recordar a la población que puede escoger el hospital al que quiere ser trasladado. Sin embargo, no siempre sucede así. Uno de los casos de los que ha tenido conocimiento el centro es el del joven David Loureiro, al que la ambulancia llevó a otro hospital pese a las peticiones de su familia.
Los pacientes más graves y complejos de los accidentes de tráfico se remiten a los hospitales públicos. Los leves, pueden escoger dónde quieren ser atendidos. Si no manifiestan ningún deseo en este sentido, la Fundación Pública de Urgencias Sanitarias de Galicia-061 sigue una "sectorización" de traslados elaborada en 2012. La central no entra a detallarla, pero confirma que se opta por derivar a los leves a clínicas privadas pata descongestionar las urgencias de los públicos y disminuir los tiempos de espera de los pacientes.
El tratamiento de estos lesionados es una de las actividades preponderantes de los servicios de Medicina Física y Rehabilitación. El de Povisa, ante los pocos pacientes que recibe a través de ambulancias, decidió realizar un análisis estadístico del asunto. Bajo la premisa de que la central del 061 da trato de clínica privada al hospital de la calle Salamanca, el estudio concluye que este "no recibe pacientes recogidos por los servicios de emergencias de manera equitativa a otros centros".
De los 234 accidentados que el servicio recibió durante nueve semanas -de noviembre de 2013 a enero de 2014- con lesión leve de columna, solo 22 fueron recogidos por los servicios de emergencias sanitarias el 9,4%- y llevados a Povisa. De ellos, solo 5 habían sufrido el accidente en el municipio vigués. Recuerda que en 2013 se registraron 1.623 víctimas de accidentes de circulación en la ciudad y que la calle con más siniestros es la Gran Vía, "a 160 metros" de Povisa.
Otros siete fueron trasladados en ambulancia a otra clínica y desviados luego en el hospital concertado. De hecho, según el estudio elaborado por el jefe de Rehabilitación, Miguel Ángel López Vázquez, "dos pacientes fueron trasladados a un centro sin su conformidad, habiendo incluso interpuesto una reclamación a su aseguradora". "Pensamos pues que existe un desinterés mostrado por las agrupaciones de ambulancias para trasladar a los accidentados en Vigo al hospital Povisa", entiende y concluye que el centro "parece haber sido excluido de los protocolos diseñados".
"Ni me llevaron a donde les pedimos ni al hospital más cercano"
- David Loureiro circulaba con su moto por la avenida de Castrelos, a la altura del pabellón del Carmen, cuando se cayó al suelo al tratar de esquivar a un repartidor a pie que pretendía cruzar por un lugar incorrecto y saliendo de "detrás de un autobús". Fue un accidente leve, pero los servicios de emergencia decidieron trasladarlo a un centro hospitalario para que valoraran su estado. El hermano de David, que acudió a auxiliarlo, pidió a los técnicos de la ambulancia que lo llevaran a Povisa, ya que su pareja estaba en esos momentos trabajando en las urgencias del complejo de la calle Salamanca. David cuenta que estos, sin embargo, se negaron. "Le dijeron que me tenían que trasladar a Fátima", asevera."Ni me llevaron a donde les pedimos ni al hospital más cercano", resalta el joven. La Fundación Pública de Urxencias Sanitarias de Galicia-061 señala que "en todos aquellos casos en los que el pacientes puede manifestar su voluntad de ser trasladado a un determinado centro sanitario, el traslado se realiza al centro que el paciente determine".Finalmente, David ha recibido tratamiento de fisioterapia y rehabilitación en Povisa, a donde lo ha trasladado su aseguradora, después de que él le comunicara lo sucedido.
