"El viguismo que siento que no me lo toquen", ha enfatizado el presidente de Terras Gaudas y pregonero del Cristo de la Victoria José María Fonseca en un discurso en el que ensalzó su amor por su ciudad adoptiva Vigo. El ourensano ha recordado los pasos de la ciudad hacia la modernidad y el potencial que todavía guarda.

Fonseca adundó en la estrecha relación que la ciudad mantiene con el Cristo porque "no hay vigués que no quiera a su Cristo", recordando las palabras del pregonero del año pasado, el presidente del Celta, Carlos Mouriño."Representa lo más bello de nuestra ciudad", señaló. "El Cristo de 'Todos' aglutina y engloba la unión del pueblo de Vigo".

El acto, celebrado en el pazo de Castrelos ha sido introducido por la presidenta de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Victoria Marora Martín-Caloto, quien ha resaltado la labor el trabajo de Fonseca a la cabeza de la marca vinícola y también ha agradecido al portador del estandarte de este año, Luciano Martínez, presidente de Ceaga, el haber acompañado al Cristo durante 50 años.

El alcalde Abel Caballero, acompañado de toda su corporación, cerró el evento con un recorrido poético por los pasos que el Cristo seguirá mañana en la procesión. El regidor destacó "la modernidad" de Vigo, que "vive en un nievo tiempo" pero continúa "arraigada y orgullosa" en las tradiciones.

La corporación municipal del Partido Popular, encabezada por Elena Muñoz, también participó en el acto, así como miembros de la Cofradía.