GALERÍA | La hoja más grande del nenúfar mide metro y medio. // José Lores
Vigo será esta semana escenario del efímero pero espectacular florecimiento del nenúfar gigante Victoria Cruziana. La Fundación Sales ha logrado recuperarlo después de un verano de ausencia por el fallecimiento de la anterior planta en el invierno de 2014 gracias a una nueva donación. "Estamos de estreno porque iniciamos el proceso desde cero y con nuevas instalaciones", explican los cuidadores, que esperan que en cuestión de horas se abra el primer capullo de la que está considerada una de las diez plantas más raras del mundo y de la que no existe otro ejemplar en todo el país.
Su inédito florecimiento en 2013 catapultó al jardín vigués a todos los telediarios por el mérito que suponía haber recreado las condiciones necesarias para el desarrollo de una especie endémica de la cuenca del río Paraná y Uruguay. Este prodigio de la naturaleza volverá a producirse gracias a la colaboración de Carlos Magdalena, responsable de plantas acuáticas del Kew Garden de Londres, que además de donar las primeras semillas hace tres años asesoró al equipo vigués durante el proceso.
"Nuestro reto ahora es lograr que la planta sobreviva al invierno y se consolide en el jardín", explican sus cuidadores, que deben revisar todos los días que la temperatura del agua no baje de los 30 grados y abonarla continuamente. El patronato ha invertido en mejorar las condiciones de la Victoria Cruziana para lograr que se quede en Vigo de forma permanente. Se ha sustituido la charca anterior por una nueva piscina y el proyecto de conservación contempla en los próximos meses dotarla de una cubierta para crear una especie de invernadero que mantenga la temperatura ambiente lo más cercana posible a la de sus países de origen.
Los trabajadores del jardín botánico no la pierden de vista y coinciden en que uno de los factores que explica su "exuberante" crecimiento este verano es la elevada temperatura del mes de julio. En 2013 el proceso completo hasta la floración duró ocho meses, pero esta vez se optó por acortar los tiempos y en lugar de iniciar el trabajo con semillas se trajo directamente una planta pequeña en primavera. La flor se esperaba para más avanzado el verano, pero los más de 30 grados de las últimas semanas dieron un impulso al crecimiento del nenúfar que ya tiene ocho grandes hojas y por ahora un único capullo a punto de abrirse. La hoja más grande mide metro y medio y la planta completa puede alcanzar los 60 kilogramos y soportar el peso de un bebé.
Pero la característica que hace extraordinaria a esta especie es que su flor se desvanece a las 48 horas y cambia de color blanco a rosáceo. Se esperan como ocurrió en 2013 y 2014 visitas desde fuera de Galicia en horario de 11.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas. Los lunes el recinto cierra, pero si coincidiese con la floración ese día se abriría de forma excepcional con entradas a dos euros. Sus responsables consideran "un privilegio" poder observar el desarrollo de una planta tan exótica y exclusiva tan lejos de su hábitat.
Aunque quizá el más sonado, el desarrollo del nenúfar amazónico no es el único éxito de Sales, con varios ejemplares de flor de loto y fósiles vivientes además de secuoyas y otras plantas en peligro de extinción.
