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Los negocios del sol

Los chiringuitos de Samil aumentan sus ventas un 500% en comparación con 2015 - La ocupación hotelera alcanza el 85%

Gerardo Triunfo vende un 20% más de helados en su negocio de la plaza de la Constitución. // M. Canosa

El calor no sienta igual a todos los vigueses, tampoco a los negocios. Comercios y locales del centro sufren los 30 grados porque los transeúntes se exilian a la costa. Las terrazas permanecen vacías hasta que el sol baja unos grados para dar un respiro. Pero otros negocios, los que viven del sol, hacen su agosto ya en julio: los chiringuitos de la playa de Samil han aumentado sus ventas un 500% en comparación con el "desastroso" verano del año pasado y los hoteles registran su mejor cifra desde la crisis, un 85% de ocupación.

David atiende un puesto de bebidas a pie de playa. Un día de calor despacha entre 300 y 350 botellas de agua. Por suerte para el negocio, todos los días de julio han sido muy parecidos. Recuerda que el año pasado apenas se sucedían dos o tres jornadas de buen tiempo. "Después llovía", lamenta. Eso ha provocado que el contraste de ventas sea drástico.

Hablar con él es complicado, este año no tiene horas muertas en el trabajo. "Solo por sed la gente ya viene a comprar de beber", explica. Pero además asegura que el aumento de visitantes portugueses ha disparado productos como el café. En las horas del mediodía sirve hasta 300.

A poco metros de él se ubica el mercadillo. Bañadores, artículo de playa y gorros. Los ambulantes también agradecen el calor continuo no solo porque sus ventas aumentan sino también porque se mantienen. Un dato: cada puesto puede vender hasta 20 gorros un domingo de sol.

El calor trae de la mano un deseado acompañante: el turismo. "Este mes es histórico" enfatiza el presidente de la Asociación de Hoteles de Vigo (Ahosvi) Jaime Pereira. La ocupación ha vuelto a marcar índices de hace 10 años. "Que el sol nos ampare mucho tiempo", pide Pereira, que vaticina al menos la primera de agosto todavía mejor con un lleno que puede alcanzar el 90%.

Estas buenísimas cifras se deben en gran medida a las Islas Cíes. Las navieras han colgado varios días el cartel de completo, como ayer mismo, y la ocupación del camping está siendo máxima. Tanto el fin de semana pasado como este han frenado la entrada de campistas 100 plazas antes de llegar al cupo máximo (800) para no saturar las instalaciones. Aseguran que de esta manera proporcionan un mejor servicio ya que los visitantes se acomodan mejor, no se forman colas en los servicios que ofrecen y se garantiza la correcta gestión del agua o la luz. Mantendrán este cupo todo el mes de agosto, que ya tienen completo todos los fines de semana.

Turistas y vigueses han conseguido aumentar también la venta de helados, hasta un 25% en algunos casos. Lo atestigua Gerardo Triunfo, dueño de La fabbrica del gelato, en la plaza de Constitución. "No recuerdo un verano así en Galicia", exclama el italiano que lleva más de 20 años en la comunidad. Después de un mayo que califica de "negativo" porque "casi no hubo primavera", julio está remontando las ventas. Puntualiza que mucho calor tampoco es bueno para los negocios, ya que vigueses y visitantes huyen a la playa. Pero a pesar de los 30 grados en las horas puntas, a medio día y a la vuelta de la playa, el producto sale más que el año anterior.

Los mismos datos proporcionan desde los comercios en cuanto textil y calzado veraniego. Bañadores, ropa informal, lino y zapato abierto han incrementado hasta un 20% su venta en comparación con el año pasado.

A los vigueses el calor parece haberlo pillado desprevenidos, incluso en cuestiones de hogar. Las grandes superficies despachan tres veces más ventiladores que hace tan solo un mes.

La donación de sangre en la ciudad desciende entre un 20 y 25%

  • "Si hace calor la gente se va a la playa o de la ciudad, pero no acude a donar". Aunque para muchos estas temperaturas son las más deseables, el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre, Manuel Fonseca, destaca que para ellos son el peor enemigo. "Ya no sabemos que hacer para que la gente venga a donar". La acumulación de días de sol ha agravado el descenso en el almacenamiento de sangre, con una bajada de entre un 20 y un 25%. El grupo que más se necesita recuperar esta semana es el A negativo.Los centros de transfusión llevan todo el mes lanzando peticiones de solidaridad previendo esta bajada que ocurre todos los años pero que se ha intensificado este julio. Fonseca llama a la donación y recuerda que para hacerlo después de ir a la playa tienen que haber pasado al menos dos horas. "El cuerpo tiene una temperatura corporal demasiado elevado, hay que esperar", explica.

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