El Gobierno municipal aprobó el convenio con Aqualia por el que se dedicarán 30.000 euros para asegurar el suministro de agua a personas en riesgo de exclusión social. Así lo anunció ayer el alcalde, Abel Caballero, quien detalló que la ayuda económica ascenderá a un máximo de 100 euros durante seis meses.

Caballero informó de la aprobación en la Junta de Gobierno del convenio que ya había sido anunciado en semanas anteriores. El presupuesto correrá a cargo de la empresa suministradora, Aqualia. El regidor recordó que el agua no se cortará a ningún usuario por motivos económicos y aclaró que este programa servirá para eximir de pago a aquellas familias que no estén en condiciones de satisfacer los abono. Caballero expuso que, a los usuarios con dificultadeseconómicas, se les oferta un plan de pagos adaptado a sus capacidades.

Programa de viviendas

El alcalde criticó ayer la insistencia de la Xunta en que la ciudad olívica se adhiera a su programa de viviendas vacías, pues calcula que le reportaría unos 15.000 euros frente a los casi tres millones de euros que el Gobierno local destina a la lucha contra los desahucios.

Caballero respondía así a las declaraciones de la conselleira de Vivenda, Ethel Vázquez que pidió el pasado viernes a Vigo que "medite" sobre esta cuestón después de que Redondela se haya añadido.

El regidor ha reprobado el programa "vergonzosamente propagandístico" de la Xunta, según el cual a Vigo le corresponderían unos 15.000 euros al año. "Menuda cara dura", proclamó Caballero, quien también se ha preguntado si en la Xunta "están de broma".

Cree el alcalde que el Gobierno autonómico quiere que la ciudad se sume a este programa "para que les lavemos la cara para las elecciones".