La Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de Galicia eleva hasta los 300.000 euros la indemnización para un hombre que fue intervenido de una rodilla en el Hospital Xeral de Vigo. El paciente - en situación de invalidez permanente tras someterse a una artroscopia en una de sus rodillas- fue intervenico en octubre de 2011, cuando tenía 35 años. El varón había sufrido una cáida y se rompió el ligamento cruzado anterior, además de presentar cambios degenerativos en el menisco interno y derrame articular, tal y como recoge la sentencia.

La Sección Primera condena al Sergas al entender que no ha quedado acreditada “la correcta aplicación del manguito de isquemia, pues en el protocolo de la cirugía de artroscopia no constan los datos relevantes de tiempo de isquemia a que estuvo sometida la pierna derecha durante la intervención, sin que sea suficiente la reseña de que esta se inició a las 9 y finalizó a las 11 horas, tampoco consta la presión de inflado, el tiempo de permanencia de inflado, ni el tipo de almohadilla utilizado. Ni siquiera figuran tales datos en la hoja de anestesia, que no fue remitida con el expediente, ni en la hoja de ATS circulante”.

Como consecuencia de la intervención, el paciente ha sido declarado en situación de invalidez permanente absoluta por síndrome de dolor regional complejo, con implante de modulación definitivo, y con persistencia de dolor, lo que le dificulta la marcha y le impide actividades en general.