Sus obras fueron estandartes del despertar de La Movida madrileña. La defensa de valores como la libertad o igualdad y la pasión con la que realiza sus trabajos, llevaron a la Diputación a pensar en Bárbara Allende, más conocida como Ouka Leele, para el diseño de la imagen de la nueva Escola Pública de Igualdade María Vinyals en el Castillo de Soutomaior. El miércoles 29 a partir de las 10.30 horas tendrá lugar la jornada inaugural con la presencia de diversas ponentes y periodistas.

-Todos sus trabajos cumplen un objetivo, tienen un porqué. ¿Cuál es la razón qué le ha motivado a formar parte de este proyecto?

-La idea en sí misma me pareció espléndida, interesantísima y muy beneficiosa para la sociedad. Me hablaron del papel que realizó María Vinyals, una de las primeras feministas gallegas, y de su aportación a la figura de la mujer que no tuve otra que aceptar el proyecto, porque es simplemente genial.

-¿Por qué se ha decantado por este dibujo final? ¿Qué quería representar en él?

-Quería hacer algo sencillo, eso era lo fundamental. Tuvimos reuniones con historiadores que nos hablaron de Vinyals y al final decidimos que lo mejor era que fuera una imagen suya, ya que sería muy complicado englobar todo su trabajo. Apostamos por hacerlo en formato dibujo ya que está dirigido a una escuela, la imagen hecha a mano, las letras también. Esta era la idea, crearla con lápices de colores que empleábamos en la infancia.

-¿Veía obligado una iniciativa como ésta, es decir, una Escuela Pública de Igualdad a día de hoy?

-Por supuesto, además es muy necesario. Aunque se supone que somos iguales, en la historia la mujer ha tenido un papel más hacia el interior, entonces esta parte de saltar al público y mostrar su trabajo, la mujer lo hace como algo más inconsciente y sí que es importante mostrar que tenemos el mismo derecho a hacerlo. Es importante que la mujer no se deje comer cuando un hombre, inconscientemente o sin querer te quiere ridiculizar o fijarse en tus piernas frente a tu intelecto profesionalmente hablando; todas estas cosas que parecen tonterías son importantes.

-En el mundo de la fotografía y pintura en particular o arte en general, ¿ha notado que la mujer esté en un segundo plano?

-Absolutamente no, pero también absolutamente sí. Depende de qué cosas. Es muy difícil en el momento en el que tienes hijos, nunca imaginé que pasase esto en el mundo del arte pero como que te "obligan" a sacrificarte completamente, como que no tienes que tener hijos para ser una gran profesional. Pero todavía es mucho peor en otras profesiones. Te miran de otra manera, como si las mujeres solo pudiéramos ser jóvenes o guapas; son cosas que sí las notas.

-Sin centrarse en un momento puntual, ¿esta tendencia de la que hablaba también se daba a sus comienzos, en los años 80, en el mundo del arte?

-Yo personalmente nunca he notado nada hasta dicho momento porque siempre he estado bien considerada, tratada y valorada. Pero sí es verdad que hay cositas que vas notando, tienes que luchar más que un hombre, hacer como un triple salto mortal para que te lo equiparen al del varón. Pero al final son muchos los artistas amigos míos que terminan pidiéndome consejo a mí.