La moañesa Nerea Piñeiro trabaja en Cíes // J. Álvarez

Dos estudiantes de doctorado forman parte del proyecto Paleopark Paleopark, la malagueña Carmen Leiva y la moañesa Nerea Piñeiro, que realizará su tesis doctoral entre la Universidad de Santiago, donde se tituló en Biología, y el CEAB de Blanes.

-¿En qué consiste su tesis y el trabajo que realiza en Cíes?

-Analizaré los metales pesados que aparecen en cada muestra para reconstruir cuándo, cómo y por qué su concentración disminuye o aumenta. También estudio otras características que nos ayudan a interpretar los datos, por ejemplo, la granulometría del sedimento, pues la forma en la que se acumula puede variar según las condiciones ambientales. Tanto en los testigos que obtengamos en Cíes como en los que ya extrajimos en Cabrera podré determinar qué metales y contaminantes son naturales, propios de los fondos y debidos a la geología de las islas, cuál era la situación anterior al impacto del hombre y qué metales son consecuencia de su actividad. Suponemos que la presencia de metales aumenta cuando empieza el impacto humano, pero tenemos que demostrarlo. y ver si hay hitos concretos que influyen en su presencia y en la forma de acumularse.

-¿Dónde va a realizar estos estudios?

-Ahora me iré un año al CEAB de Blanes y después volveré a mi grupo de Santiago, el de Ciencias del Sistema Tierra, del departamento de Edafología, para finalizar mi tesis.

-¿Qué significa para usted trabajar en un proyecto internacional de este calibre y al lado de su casa?

-Participar en un proyecto tan importante y estar al lado de mi casa es un lujo. Estoy aprendiendo muchísimo. Formar parte de una iniciativa así al principio de mi tesis es algo que muy poca gente puede decir. La verdad es que he tenido mucha suerte en este sentido.