Uno de esos buques que asombran por sus dimensiones acaparó ayer la atención de los operarios de la terminal Ro-Ro de Bouzas. El Glovis Cardinal, de 199,1 metros de eslora y 32,3 de manga, figura en la lista de los mayores "portacoches" del mundo, y es el tercero más grande registrado en estos muelles después del MV Fedora (227 metros) en 2009 y el Glovis Century (200) en 2014. Y como ocurrió con estos dos últimos, su presencia obedece a la descarga de coches Toyota procedentes de Durban (Sudáfrica).

Recibido por Termicar actuando como agente y estibador Bergé Marítima, el Glovis Cardinal protagonizó un movimiento menor para los volúmenes habituales en la terminal viguesa. Descargó 205 unidades de la marca Toyota, "principalmente para su transbordo hacia el Mediterráneo", según fuentes portuarias.

Pero la arribada a Vigo de este coloso estrenado en 2013 por la naviera Hyundai Glovis, capaz de transportar hasta 6.000 coches estacionados en sus 13 cubiertas, ha vuelto a poner en evidencia las limitaciones de la terminal en cuanto a atraque con calado para los grandes Ro-Ro. El Glovis Cardinal debió esperar tres horas parado en Cíes a la espera de que quedara libre en Bouzas la rampa 6, ocupada hasta las 13.30 por el Sea Patris, de 177 metros. Tampoco la rampa contigua, la número 5, estaba disponible ante la inminente entrada del Coral Leader, con un cargamento bastante más elevado. A estas "complicaciones" apelan los operadores para defender la conversión en línea de atraque de la escollera de Bouzas, donde no existen limitaciones de calado (supera los 20 metros de profundidad).

Y cada vez los buques son más grandes. El ranking mundial de Ro-Ro lo encabeza el MV Tonsberg, 65 metros más largo aunque igual de ancho que el Cardinal. Esto marca la tendencia en las construcciones de los últimos"portacoches" . Más manga y también altura para ofrecer igual capacidad aun con una eslora menor. De ahí que al recién botado Höegh Tracer se le considere "el mayor del mundo". A pesar de sus 200 metros de largo, con 36,3 de ancho y 46,5 de alto carga hasta 8.500 vehículos repartidos en 14 cubiertas. Lo que apenas varió del diseño de estos nuevos gigantes es el calado. Se mantiene por encima de los 10 metros, lo que deja a la terminal de Bouzas en desventaja en la captación de estos tráficos al contar solo con dos rampas con este fondo.