La reforma que impone plazos máximos en las instrucciones adelgazará las montañas de expedientes que se acumulan en los nueve juzgados vigueses que realizan esta labor de investigación: los ocho de Instrucción y el especializado en violencia de género. La Fiscalía tuvo que revisar en los últimos meses las más de 1.160 causas de estas salas cuyo período máximo ordinario de seis meses de indagaciones concluía mañana lunes, al cumplirse precisamente el medio año desde la entrada en vigor del cambio legal. Y tras instar la declaración de complejidad de 368 de estos litigios -lo que supone la prórroga de las pesquisas judiciales hasta junio de 2017- e interesar también la ampliación en varias decenas más de pleitos mediante la fórmula alternativa de plazos máximos, quedaron más de 700 en los que los fiscales no vieron precisa la práctica de más diligencias. Una abultada cifra de asuntos cuya instrucción finaliza, bien mediante la transformación de las diligencias en procedimientos abreviados o sumarios para encaminarlas a juicio o bien mediante su archivo al no hallarse indicios de delito o no haber autor conocido. Los asuntos en los que se da por finalizada la instrucción se elevarían a casi 1.200 [de un total de 1.926 revisados] al sumar a los de Vigo los juzgados de Redondela, Tui, Porriño y Ponteareas. Y a más de 3.600 [de un total de 4.963 controlados] en los tribunales de toda la provincia pontevedresa.
La reforma de plazos no acaba mañana. A partir de ahora el trabajo de revisión de causas deberá de ser continuo. Pero lo que sí es cierto es que, de cara a este lunes, fiscales y juzgados tuvieron que poner la lupa sobre un verdadero aluvión de casos ya que eran centenares los expedientes, algunos de años atrás, que estaban en tramitación cuando el 7 de diciembre de 2015 entró en vigor la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Todos ellos se toparon, de repente, con la fecha límite de este 6 de junio.
El esfuerzo "titánico" realizado durante estos meses, señalan los distintos operadores judiciales, ha permitido que el trabajo de revisión se haya podido completar con éxito. Del total de 1.166 asuntos que caducaban este lunes en Vigo, los fiscales solicitaron la declaración de complejidad en 368 de ellos: en todos estos casos el plazo de indagaciones se amplía a 18 meses -a contar desde la fecha en que arrancó la reforma-, lo que supone que los jueces podrán seguir realizando diligencias de investigación hasta junio de 2017. Y una vez llegada esa fecha, la ley permite a los magistrados, a instancia del Ministerio Fiscal y previa audiencia de las partes, ampliar de nuevo las pesquisas por un máximo un año y medio más. Asuntos como la Operación Patos, el caso Hormigón, el de los enchufes, el del mercado de A Pedra o el de Bautista Administradores son algunos de los más destacados calificados de complejos.
El tribunal vigués donde se instó la declaración de más casos complejos es el Juzgado de Violencia sobre la Mujer: en 118, lo que supone casi la mitad de los 265 expedientes de maltrato revisados. La Fiscalía atribuye esta situación "a un problema de vencimiento de plazos". Entre los asuntos más graves que tramita esta sala están dos crímenes de violencia machista ocurridos en 2015. Mientras, en los ocho juzgados de Instrucción las cifras de litigios cuyas pesquisas se ampliaron hasta junio de 2017 variaron desde los 7 de uno de estos tribunales a los 55 de otro.
Al margen de declararse la complejidad, hubo varias decenas de pleitos en estas salas en los que se requirieron plazos extraordinarios (plazos máximos): ello supone que una vez se llegue al límite fijado las pesquisas deberán ya cerrarse. Fuentes judiciales dicen que este supuesto se aplicó por ejemplo en litigios únicamente pendientes de alguna prueba o pericial concreta.
