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La mediación penal se estrena en los juzgados con un caso de atropello mortal

La sala deja en suspenso el procedimiento, a las puertas del juicio, a la espera de cómo avance este proceso de diálogo en el que intervendrán los cuatro acusados y familiares de la fallecida

La zona de Candeán donde ocurrió el atropello mortal. // A. Irago

La mediación como alternativa a la vía judicial para la solución de conflictos aún está despegando en los juzgados de Vigo. Ya hay experiencia en la jurisdicción civil, con un servicio de mediación familiar intrajudicial dependiente de la Xunta centrado en litigios matrimoniales y en activo desde 2012. Pero donde todavía no se había abierto paso era en el ámbito penal. Hasta ahora. Porque el Juzgado de Instrucción 7 acaba de derivar a mediación un caso que ya estaba casi a las puertas de juicio: la causa abierta al conductor de una furgoneta que en 2015 arrolló mortalmente a una mujer de 77 años en Candeán y después se dio a la fuga. La iniciativa surgió de los propios acusados, este joven y los tres que iban con él aquel día en el vehículo, y ni la acusación particular, que representa a la familia de la fallecida, ni la Fiscalía se opusieron. Por ello, el tribunal ha dejado en suspenso el procedimiento, en el que la fiscal pide en su escrito provisional una pena de 8 años de cárcel para el principal encausado, y ha dado un plazo de un mes a las partes para esta mediación en la que intervendrán los acusados y familiares de la víctima, que dejó esposo y tres hijos.

¿En qué consistirá el proceso? La mediación penal supone la participación voluntaria del imputado por un delito y de la víctima -o familiares- en un proceso conducido por un mediador imparcial -lo ideal es que participen un jurista y un psicólogo- para lograr la reparación adecuada al daño causado. En definitiva, que el infractor se responsabilice del hecho cometido, de forma que entienda y asuma el daño causado y pida perdón, y que el perjudicado, que muchas veces no ve colmadas sus expectativas en el proceso penal tradicional, se vea reparado ya no sólo económicamente, si fuese el caso, sino sobre todo anímica y moralmente. El proceso, al que se da inicio con entrevistas informativas en las que las partes deben consentir la mediación, se hace con sesiones individualizadas y si es posible, dependiendo de la voluntad de los intervinientes, también conjuntas.

El juzgado está ahora a la espera de cómo avanza este primer caso derivado a mediación penal en Vigo. De fracasar la iniciativa el procedimiento seguiría de forma convencional y, de prosperar y alcanzarse lo que se denomina un acuerdo reparador, éste sería trasladado a juez y fiscal para canalizarlo en el proceso judicial en curso. Varias fuentes consultadas creen que en un asunto así, un reconocimiento de hechos por parte de los acusados podría derivar por ejemplo en la apreciación de la atenuante de reparación del daño que contempla el Código Penal, redundando en una rebaja de la condena y facilitando que la causa se resuelva por vía de la conformidad. Se evitaría así el juicio, que en este caso compete a un jurado popular.

Con escrito del fiscal

Cuando se pidió la mediación el caso estaba avanzado y la fiscal ya había formulado escrito de calificación. A la espera de cómo influirá el proceso de diálogo, la petición provisional para el conductor, D.P.F., vecino de la parroquia donde vivía la víctima, es de 8 años de cárcel y otros 6 de retirada del carné por la presunta autoría de un delito de homicidio por imprudencia grave y otro de omisión del deber de socorro agravado. Para los otros tres jóvenes, supuestos coautores del delito de omisión, la solicitud es de 4.320 euros de multa.

Ocurrió la mañana del 26 de abril de 2015. La Fiscalía relata que el conductor guiaba una furgoneta por la Subida a Hermida, en Candeán, a "gran velocidad" cuando, en la confluencia de las calles Salgueiro y Goleta, arrolló a la mujer, Obdulia S.C., que iba a cruzar la calle para tirar la basura. La fiscal sostiene que pese a "ser consciente del atropello" y de los daños en la furgoneta, el conductor "huyó del lugar", "desatendiéndose del estado de la víctima". Los tres chicos que iban con él no pidieron al conductor que parase. Esa tarde, gracias a la colaboración vecinal, la furgoneta fue localizada por la Policía Nacional en Chapela (Redondela) con el conductor dormido en el asiento del copiloto. Dio 0,10 en la prueba de alcoholemia que se le hizo más de cinco horas después del siniestro y positivo a THC -principal constituyente psicoactivo del cannabis- en la de detección de drogas.

"La mediación humaniza el proceso"

Expertos destacan que esta vía facilita que el infractor "entienda el daño causado" y da más protagonismo a la víctima "reparándola anímicamente"

  • Aunque se aprobaron proyectos piloto en algunos juzgados y se están dando pasos, la mediación penal es aún una asignatura pendiente en Galicia. Y ello pese a que son muchos los profesionales, y de diversos ámbitos, que llevan años luchando y divulgando los beneficios de esta alternativa al proceso judicial tradicional. Ahora esperan que esta primera causa derivada a mediación en la urbe olívica no se convierta en un caso aislado. "Vigo es una ciudad dinámica y si se pusiese en marcha un servicio de mediación penal intrajudicial sería muy positivo, ese es el camino por el que hay que ir", destaca Julio Díaz Casales, magistrado de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) con formación en mediación que precisamente en diciembre del pasado año organizó unas jornadas sobre la materia en Vigo.La resolución de conflictos penales mediante la mediación en la provincia de Pontevedra sólo se lleva a cabo en la jurisdicción de menores. Pero para esta misma jurisdicción en el ámbito de los adultos aún no existe "una regulación concreta". Así lo señala Esther Pillado, catedrática de Derecho Procesal de la Universidad de Vigo y una de las responsables del servicio de mediación familiar de Vigo. Lo que sí hay, destaca, son "algunas disposiciones" en el Código Penal, a raíz de la última reforma, y también en el Estatuto de la Víctima aprobado el pasado año. En este último texto se establecen requisitos para acceder a la también denominada justicia restaurativa con el fin "de obtener una adecuada reparación material y moral de los perjuicios derivados del delito", entre ellos que el infractor "haya reconocido los hechos esenciales de los que deriva su responsabilidad" y que tanto éste como la víctima "presten su consentimiento" al proceso, en el que la voluntariedad y la confidencialidad son algunos de los principios básicos.Beneficios¿Cuáles son los beneficios? Los especialistas resaltan que la mediación "humaniza" el proceso. "En el procedimiento penal muchas veces se olvidan de reparar a la víctima", dice Esther Pillado. El magistrado Julio Díaz agrega que el aparato judicial incluso "las angustia y estresa más". La mediación, señalan, posibilitaría que se las "repare adecuadamente". "Se les da la oportunidad de entender lo qué ocurrió, que se las repare anímicamente; lo que quieren los perjudicados es recuperar su vida", opina la catedrática de Derecho Procesal.¿Y los infractores? "El objetivo es que se responsabilice del delito cometido", explican. Las ventajas para el acusado serían una atenuación de la pena o sistemas de cumplimiento alternativos. Fuentes de la Fiscalía, que también destacan la idoneidad de esta vía, aclaran en todo caso que sólo en determinadas circunstancias, y siempre en el ámbito de delitos leves, un acusado que se someta a la mediación podría eludir la condena y resarcir su daño por otras vías.

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