El Sindicato Unificado de Policía en la ciudad (SUP), la Confederación Española de Policía (CEP), Unión Federal Policía (UFP) y Sindicato Independiente Policía (SIP) han querido reivindicar su actuación al frente del Servicio de Atención a la Familia tras las acusaciones vertidas por el sindicato ASP (alternativa sindical de Policía) afirmando su "dejadez" en protocolos de protección de víctimas de violencia de género.

Reconocen la falta de personal con la que cuenta dicha unidad, lo que provoca importantes cargas de trabajo, pero también matizaron que esto deriva, "bajo ninguna circunstancia", en una "desatención a las víctimas". Afirman además que desde la comisaría de Vigo-Redondela, el trato que se les da a estas mujeres es el "correcto" y reiteran que nunca fueron calificadas como "ciudadanas de segunda clase".

En un comunicado firmado por los sindicatos locales, reafirman la unidad de Servicio de Atención a la Familia como una de las referentes policiales en su especialidad a nivel autonómico, aunque tampoco olvidan que la escasez de personal afecta a todas las dependencias; carencia que vienen denunciando desde hace meses.