La comunidad de propietarios de un edificio de Teixugueiras, en Navia, ha denunciado a la constructora Dragados por la presencia de deficiencias estructurales en su edificio. Después de tres años de espera, hoy arranca el juicio civil contra los arquitectos y la empresa. Los vecinos reclaman una indemnización de 2,5 millones de euros por los costes de las reformas y 1 millón por daños morales.

"Somos 72 David contra Goliaths", sostienen los afectados. Los hechos se remontan a principios de 2010, cuando la constructora tuvo que realizar las primeras reformas en las viviendas tan solo un año después de su entrega. "Aquellas reparaciones fueron solo el maquillaje de defectos que de forma progresiva y constante se han agravado en estos seis años", explican. Aseguran que todos los pisos tienen grietas o baldosas que se levantan y que sienten "como se mueve el edificio".

Señalan que la cimentación no fue apropiada para el lugar pantanoso en el que se edificó y califican la ejecución de "defectuosa". Todo el conjunto ha hecho que "una vivienda nueva no valga nada", lamentan. Confiesan que lo están "pasando muy mal" con el agravante de no poder vender los pisos, por los que pagaron más de 200.000.000 euros. "Al final no tienes nada", inciden.

La denuncia recae sobre la empresa, los arquitectos J.M.O. y E.A. y el aparejador J.S. El juicio se ha retrasado tres años, entre otros factores porque uno de ellos solicitó justicia gratuita, según explican. Hoy está previsto el interrogatorio de las partes y en próximos días continuarán las declaraciones de testigos y peritos.