La Autoridad Portuaria de Vigo espera conocer hoy las verdaderas razones que motivaron la marcha de Maersk de Vigo. Es el primer objetivo de la reunión que mantendrá esta mañana su presidente, Enrique López Veiga, con directivos de la naviera en el puerto de Algeciras, sede central en España del gigante danés del transporte marítimo de contenedores. López Veiga tratará de convencerles de que rectifiquen la decisión del traslado de sus operaciones a Marín, adoptada tras una subasta convocada por internet. "Pero lo logremos o no, lo que sí sé es que indiferente no les voy a dejar porque insistiré en las consecuencias negativas de su decisión para numerosas empresas viguesas que al fin y al cabo son sus clientes", avisó.

Celebrado a petición del presidente del puerto vigués, la duración del encuentro durará dos horas. A priori parece improbable que la naviera acceda a repensarse su decisión. Ya comunicó oficialmente a sus clientes de Vigo que el inicio de las operaciones en Marín será el 18 de mayo, aunque dos días antes ya está programada la primera escala de sus buques, y el 4 de mayo llegará a este puerto el primer barco con contenedores vacíos. Sobre el anuncio de que mantendría "temporalmente" su actividad en ambos puertos ya aclaró a estos mismos clientes que esta actividad compartida acabaría "a partir de la semana 20", es decir, cuando comienza a operar en Marín. Desde esta fecha la presencia de Maersk en el recinto vigués se limitará a dos buques feeder a la semana: uno procedente de Tánger, y otro de Algeciras que también escalará en Marín, según la parrilla de escalas divulgada en su web. En Vigo mantendrá sus oficinas, si bien la plantilla ha menguado de forma considerable en los últimos años, y ahora la componen solo dos comerciales: uno dedicado a la carga seca y otro a la congelada.

Sin conocer la disposición de los directivos de la Maersk a revelar detalles hasta ahora sujetos a normas de "confidencialidad" impuestas en la subasta, López Veiga tratará de averiguar las "claves" de la debilidad de la oferta de Termavi (concesionaria de la terminal de contenedores de Guixar). "Necesitamos saber en qué falla el puerto para corregir los errores y mejorar nuestras opciones de cara a otra próxima subasta", razona.

En este sentido precisa que "aún no está claro" que la naviera se proponga sacar otra vez a concurso sus tráficos el próximo año. "Todo apunta que será así, y que el compromiso con Marín acaba el 31 de mayo de 2017", añade, pero Maersk aún no se pronunció al respecto ni aclaró por qué eligió el sur de Galicia para organizar la primera subasta en España.

Malestar de la Sagep con Llorca

E independientemente del resultado de esta entrevista con los directivos de Maersk, insiste en la necesidad de "hacer cosas en casa", en referencia a los altos coste de la estiba. Según el responsable de Praza de Estrela, en la reunión que ya mantuvo con las empresas accionistas de la sociedad de estiba (Sagep), estas le mostraron su "malestar" con el presidente de Puertos del Estado, por reprocharles que no hubiesen negociado acuerdos con sus estibadores para abaratar la mano de obra, siguiendo el ejemplo de Marín. "Estas empresas se sienten víctimas de la actual situación. Aegan que fue Puertos quien les obligó a meterse en la Sagep", reproduce López Veiga, quien se ofreció a actuar de "mediador" entre empresas y estibadores.