El pleno acabó con gritos y abucheos desde el público de varios afectados en riesgo inminente de ser desahuciados de sus viviendas. La última moción, en la que el PP reclamaba al gobierno local que ponga los 15 pisos municipales de la calle Rosalía a disposición del programa de viviendas vacías de la Xunta para ofertarlas con alquileres sociales, activó la protesta.
Los afectados increparon al gobierno local, calificando de "inmoral" que estén a la venta los pisos y reclamando soluciones, ya que hay riesgo inmediato de desahucio para varias familias, en un caso fijado para el mes próximo. También aseguraron que el gobierno local hizo caso omiso a reiteradas peticiones de reunión para buscar una salida. "Hasta trece veces", sostienen.
"No habrá ni uno"
El regidor, Abel Caballero, intervino para mantener que "mientras sea alcalde no hubo, hay ni habrá ni un solo desahucio en Vigo".
Elena Muñoz denunció que "hay muchas familias desesperadas y se encuentran las puertas del alcalde cerradas después de haber presumido de que su despacho es la oficina antidesahucios de la ciudad". María José Caride mostró su "mayor respeto a las personas en situación de dificultad" y defendió la actuación municipal en política social, achacando a la Xunta que "siendo la que tiene la competencia, no hace nada para facilitar vivienda".
Rubén Pérez criticó que "el Concello y la Xunta se tiran la pelota" y reclamó que el gobierno local habilite un parque público de viviendas sociales, en la línea de otros municipios. Marea se abstuvo en la moción. El PSOE votó en contra, con lo que quedó rechazada.
Por la tarde el Concello emitió una nota en la que señala que las personas que protestaban "ya fueron atendidas por los servicios sociales del Concello. se les otorgaron ayudas de emergencia y se les ofrecerá una solución en ausencia de atención por parte de la Xunta, que es la que tiene las competencias".
Durante la primera hora del pleno unas quince personas de los colectivos Red Solidaria Popular y Os Ninguéns protestaron en Praza do Rei de reclamando al Concello viviendas en régimen de alquiler.
