El Casino de Vigo acumula una amplia historia, reflejada en numerosos documentos y también en la particular relación que tuvo con distintos ámbitos de la ciudad. Desde que se fundó en 1847 atravesó por diversas etapas. Quizás la más importante tuvo lugar en 1926 cuando se instaló en el actual teatro Afundación, durante décadas conocido como el García Barbón. Y ya no se movería de allí hasta su desaparición en 1992.
Fue en 1847 cuando un grupo de personas decidió abandonar la Sociedad La Tertulia para crear una nueva que llevaría el nombre de Círculo, según los historiadores. Sus promotores constituyeron una estructura cerrada a la que solo podían acceder las personas más influyentes y aristocráticas de la ciudad. Arquitectos, políticos, abogados o jueces formaron parte de la misma. Al mismo tiempo, elaboró un amplio programa de actividades, algunas de ellas tenían fines benéficos.
En 1859 cambió su nombre por el de Casino de Vigo. Con el paso de los años fue creciendo el número de socios. Algunas fuentes llegan a señalar que se superaron los 500 en sus mejores épocas. Para acceder era necesario cumplir con una serie de exigentes requisitos.
La sociedad vivía de alquiler. Siempre estuvo instalada en las calles más céntricas. Varios fueron los lugares en los que quedó su nombre grabado. Así hasta que en 1926 se mudó de manera definitiva al Teatro García Barbón. Allí instaló su lujosa sede social, la biblioteca y la sala de fiestas. El programa de actividades eran muy intenso, con actuaciones musicales todos los fines de semana, cenas de gala e incluso exposiciones de arte.
Sin embargo, con el paso del tiempo se generó un conflicto. El acceso era por la puerta principal. Los espectadores que querían ir al teatro tenían que hacerlo por los laterales. Eso generó una gran polémica nunca solucionada. Los responsables del Casino de Vigo no aceptaban negociar una solución.
La entidad también pensó en realizar algunos proyectos que quedaron en el olvido. El más ambicioso fue el organizar un ciclo de conferencias con destacadas personalidades internacionales. A pesar de los intentos, no encontró el respaldo suficiente para desarrollarlo.
Gran prestigio
Pero el Casino de Vigo gozaba ya un gran prestigio. Eran famosas sus cenas y bailes. También sus espectáculos culturales. Y las visitas de ilustres. Quizás las más llamativas fueron las que realizaron los reyes Alfonso XII y Alfonso XIII a sus instalaciones. Con ello quedaba demostrado también la filosofía elitista de la sociedad.
En su historia también quedó reflejado las Fiestas Blanco y Negro que se celebraron durante varios años. Fue en 1960 cuando el grupo Los Vampiros fue el protagonista de una de ellas. En Vigo se había creado un movimiento musical de jóvenes que tenía un gran impacto. Muchos de esos conjuntos ensayaban en locales clandestinos, según las referencias de la época. El Casino de Vigo decidió organizar un festival e invitar a Los Vampiros, el primer grupo de rock que utilizó guitarras eléctricas en sus conciertos en la ciudad.
En 1992 concluyó la historia de la entidad. La transformación de la sociedad y el cambio de hábitos dejaron al prestigioso club sin argumentos para continuar con su actividad. Perdió a sus socios más jóvenes y los mayores se alejaron de sus actividades. Su disolución fue también un alivio para el Teatro García Barbón, que pudo mejorar sus instalaciones.
La historia del Casino de Vigo quedó reflejada en documentos que se guardan en lugares como la biblioteca municipal y la de la Escuela de Artes y Oficios. Se trata de una entidad histórica con tantas singularidades que que varios estudios han analizado sus actividades.
