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La marcha de Vigo de la mayor naviera del mundo

López Veiga: "Es imposible competir ahora con Marín pero si no actuamos perderemos más tráfico"

Exigirá "explicaciones" a Termavi si confirma que sabía desde hace meses del riesgo de que la naviera dejase Guixar

Un buque de la naviera Maersk cargado de contenedores aproximándose a la terminal de Guixar. // Ricardo Grobas

Enrique López Veiga da por perdidas todas las operaciones de Maersk en Vigo ya sin esperar a esa reunión solicitada con los directivos de la naviera. Ahora su principal temor es que la decisión del gigante del transporte marítimo abra los ojos a otras compañías pertenecientes a un sector que resuelve trasladar actividad adonde se preste un servicio similar al mínimo coste. "En estos momentos es imposible competir con Marín, y de seguir así perderemos más tráficos", admite. Ante esta perspectiva, basada en preocupantes antecedentes como la marcha del tráfico frutero y eólico también a la terminal marinense, el presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo dice sentirse "obligado" a reaccionar para corregir esos "fallos" de competitividad del recinto vigués, "centrados no solo en el problema de la estiba: hay otras muchas cosas". Entretanto intenta parar la llegada de Maersk a Marín, como revela el contenido de la carta enviada a Puertos del Estado a la que tuvo acceso y publicó ayer FARO en exclusiva. Sobre este escrito, donde entre otras demandas reclama al ente estatal que se prohíba la actividad de la naviera en Marín por ubicarse sobre un relleno declarado ilegal por los tribunales, el dirigente portuario guardó ayer absoluto silencio. "Es una cuestión interna", zanjó.

Aunque reticente, sí quiso aclarar que en su postura pública tras conocer la decisión de la naviera, "no hay nada personal ni contra Maersk ni mucho menos contra el Puerto de Marín". López Veiga defiende la competencia entre terminales. "La competencia es sana siempre que se ejerza en igualdad de condiciones", circunstancia que en estos momentos asegura que no se produce en Marín. Explica que la "diferencia fundamental", donde radica la principal debilidad del puerto de Vigo, "es que en Vigo no se pueda contratar mano de obra para cargar o descargar fuera de la plantilla de estibadores dirigida por la Sagep, mientras que en Marín contratan con total libertad de mercado con empresas externas". "El principal desequilibrio de costes lo provoca la Sagep, la sociedad de estiba, pero también me dicen que hay muchas otras cosas que arreglar", añade.

Estas sociedades de estiba están abocadas a desaparecer. Una sentencia dictada en 2014 por el Tribunal de Justicia Europea condenó a España a liberalizar la prestación de servicios portuarios. En Vigo, 120 estibadores monopolizan casi toda la actividad de carga y descarga. En Marín, la plantilla de su Sagep de Marín es menor, de apenas 20 operarios, proporcional a la actividad de sus muelles (Vigo movió el año pasado 4,2 millones de toneladas y Marín poco más de 2 millones; el primero recibió 1.686 buques mercantes, y el segundo, 609).

"Las Sagep parten de una ley del PSOE pero hay una condena a España del tribunal europeo que le obliga a retirarla. Puedo comprender que el gobierno actual está en funciones y no pueda legislar, pero o se arregla el problema de la Sagep en Vigo o se obliga al de Marín a actuar igual que la de Vigo", resume López Veiga. Entiende el dirigente portuario que "no se puede permitir que se le quite a un puerto un tráfico mediante condiciones desventajosas".

Desde que este periódico adelantó la intención de Maersk de abandonar Guixar, donde hasta el 40% de los 200.000 contenedores movidos el año pasado están vinculados a buques de la naviera, el malestar del presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo con la concesionaria de la terminal, Termavi, ha ido en aumento. "Cada vez resulta más obvio que se nos podía haber avisado antes", razona López Veiga en referencia a la iniciativa de Maersk de adjudicar mediante una subasta en internet sus operaciones en el sur de Galicia. Constatada esta sospecha ahora le falta por confirmar desde cuándo Termavi sabía que estaba en juego la marcha de Vigo de la naviera. "Me estoy enterando ahora de que esto de la subasta se decía desde hace algunos meses. Si lo confirmo, naturalmente que exigiré explicaciones a Termavi", avanzó.

Críticas de Caballero

Maersk iniciará sus operaciones en Marín el 18 de mayo. Operadores portuarios de Vigo dan por hecho que reubicará en ese puerto todos los tráficos que explota en Guixar: el buque semanal feeder procedente de Algeciras, y un mercante de mayor porte sin frecuencia fija llegado desde Walvis Bay. Para el alcalde de Vigo, en la pérdida de este tráfico también tiene parte de responsabilidad la ministra de Fomento y el presidente de la Xunta. Pese a que Ana Pastor argumentó el día anterior que se "trata de un asunto entre empresas donde no intervienen las instituciones" , el regidor vigués afirma que la ministra "da de nuevo la espalda a Vigo". "La economía de Vigo está amenazada y Feijóo no hace nada. Nombró al responsable anterior, López Chaves, para hacer política y ahora Feijóo da también la espalda a Vigo. Nunca están al lado de Vigo", declaró a la cadena Ser.

Los transportistas cifran en 50 euros el sobrecoste de viajar hasta Marín y critican la "inflexibilidad horaria" en Termavi

  • Los transportistas protestaron hace dos años por la reordenación del espacio en el entorno de la terminal de contenedores emprendida por la Autoridad Portuaria. Esta medida acabó con el aparcamiento gratis de las gabarras en Guixar y en paralelo redujo de manera drástica el espacio donde los camioneros pudieran estacionar. El Puerto justificó la decisión para favorecer la ampliación del recinto de Termavi ante el previsible aumento del movimiento de contenedores. A partir de ese momento sólo hay 100 plazas disponibles para aparcar dentro del recinto portuario que se adjudican cada año, y los transportistas estacionan en zonas alternativas cercanas al puerto, como en los terrenos de Adif. Camilo González y Carlos Quintanilla, gerentes respectivamente de Apetamcor y ATC, las dos principales asociaciones que representan al colectivo del transporte de contenedores, conocen con exactitud lo que mueve Maersk en Termavi."En la terminal de Vigo se mueven a diario uno 500 Teus [la unidad estándar de un contenedor de 6,1 metros]. Un tercio son de Maersk, otro tercio de MSC, y el resto, de otras navieras", estima González. Para este gerente el anuncio de la naviera de operar en Marín "se produce en muy mal momento". "Habrá un sobrecoste, pero si no queremos perder al cliente de Vigo, una parte lo repercutiremos al cliente y otra la asumiremos nosotros", vaticina. Y pone cifras: el gasto entre peajes, gasóleo y neumáticos rondará los "50 euros por viaje".Para Carlos Quintanilla, la marcha de Maersk"resulta incomprensible, con la concentración de frigoríficos que hay en Vigo". La pesca congelada es la principal carga que viaja en los Teus de la naviera danesa, por lo que entiende que "su traslado a Marín obedece a una falta de competitividad de la terminal viguesa". El gerente de ATC insta al presidente del Puerto a "aprovechar el toque de atención de Maersk para corregir lo que está mal y no volvamos a recibir otro".Los transportistas saben que el elevado coste de la estiba es solo uno de los factores que restan competitividad a la terminal. Un camionero que opera indistintamente en Vigo y Marín lo resume así: "En Marín la terminal abre de forma ininterrumpida de 8.00 a 20.00. En Termavi paran a media mañana, también a media tarde; por no hablar de los fines de semana; o te avisan el mismo día por email cuando cierran. Es un Cristo".Con este transportista coinciden otros tantos consultados por este periódico al criticar la "inflexibilidad horaria en Termavi". A causa de esta rigidez aseguran que en ocasiones pasan "más de una hora de brazos cruzados" a la espera de poder salir o entrar a la terminal.

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