El proyecto de reforma y consolidación del polígono industrial de Balaídos ha iniciado hoy su tramitación con la entrega del mismo por parte de Zona Franca de Vigo a la Consellería de Economía, Empleo e Industria, con la perspectiva de que el proceso finalice en junio.

Las obras, presupuestadas en unos 50 millones de euros y entre las que no se incluye una pista de pruebas prevista inicialmente, se circunscriben al actual ámbito del polígono y cumplen con los requisitos planteados por la factoría de PSA Peugeot Citroën para construir las furgonetas K9 y poder optar a un nuevo lanzamiento.

Así lo han destacado la delegada del Consorcio de Zona Franca de Vigo, Teresa Pedrosa, y el conselleiro de Industria, Francisco Conde, tras la entrada en vigor ayer de la ley de artículo único que permite a las administraciones, en casos de necesidad justificada e interés público, tramitar determinadas obras por la vía de urgencia.

Pedrosa ha hecho hincapié en que el proyecto hubo que reformularlo tras la anulación del Plan Xeral de Vigo y en que la ampliación del polígono de Balaídos "está en stand by", al igual que la del parque tecnológico y logístico, y ha añadido que esto "lleva otro proceso", vinculado al convenio con el Concello de Vigo.

Ha abundado en que la ampliación "es necesaria" porque "todas las fábricas del futuro van buscando ubicar a proveedores y demás alrededor" de la misma, pero en vista de que esto "llevaría tiempo", y más tras la anulación del PXOM, se han reordenado las infraestructuras necesarias para la K9 y la opción de más modelos.

El conselleiro Francisco Conde ha significado que el proyecto que hoy inicia su andadura permitirá abordar "un reto en el que llevamos trabajando mucho tiempo: que se pueda construir la K9 y se puedan concretar las diferentes inversiones por parte de las industrias de componentes", cerca de 2.000 millones vinculados a las furgonetas.

Conde ha hecho hincapié en que las administraciones están dando "una respuesta ágil" a través de una ley de artículo único que tiene "la máxima seguridad jurídica" y además "respeta la autonomía municipal", en tanto en cuanto, en el procedimiento, el informe del Concello de Vigo será preceptivo y vinculante.

Ha detallado que su departamento realizará un primer informe que establezca la urgencia del proyecto y su motivación económica, se derivará a la Consellería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, donde se llevarán a cabo todos los trámites pertinentes.

"Esperamos que todos los trámites puedan estar cumplimentados a lo largo del mes de junio y, a partir de ahí, se pueda aprobar por parte del Consello de la Xunta", ha resumido Conde, quien ha valorado que todas las administraciones estén actuando "con responsabilidad".