El paso ayer por los juzgados vigueses de Sinaí Giménez, del clan de los Morones, para declarar como investigado por la agresión con una barra de hierro a un zamorano en plena Gran Vía de Vigo sirvió al que es presidente de la Sociedad Gitana Española para declararse "inocente" ante el juez, pero también, ya en declaraciones a los periodistas, para anunciar que no ha abandonado sus aspiraciones políticas. "Hay una conspiración político-policial contra mí, pero pese a quien le pese volveré a presentarme a las próximas elecciones de Vigo; volveré a ser el Obama gallego y lucharé por la alcaldía", dijo al término de un interrogatorio en el que fue asistido por su nuevo abogado, José Luis Gutiérrez Aranguren, el letrado de la madre de Asunta.

El conflicto entre morones y zamoranos mantiene a Giménez como investigado en tres causas: en Cangas, en Redondela y en Vigo, por la que fue citado ayer por Instrucción 8. Los hechos fueron el 3 de febrero. La versión de Sinaí, según Aranguren, es que conducía su coche, con un acompañante y sus dos hijos menores, y que fue perseguido por una furgoneta de zamoranos que "trató de echarlos de la calzada" en Gran Vía. La versión de las víctimas es que fue al revés.

Giménez asegura que no bajó del vehículo. Su acompañante, también investigado, asumió la autoría: que salió y golpeó con la barra de hierro el parabrisas de la furgoneta del zamorano. También dijo Aranguren que si bien una testigo identificó inicialmente a Sinaí como el agresor, ésta después no lo reconoció en unas fotos. El penalista avanzó que pedirá el sobreseimiento y que éste se personará como acusación contra el conductor de la furgoneta por las lesiones de sus hijos en la "maniobra" de tráfico.