La oposición puso ayer el grito en el cielo contra el borrador del nuevo reglamento del pleno de la Corporación encargado por el gobierno local, y lo califica de "totalmente antidemocrático" al sostener que restringe derechos ciudadanos y dificulta el control político sobre la gestión del alcalde y sus ediles. La portavoz popular, Elena Muñoz, tachó la propuesta de "ejercicio de tiranía" y denunció que "aplica el autoritarismo y la falta de transparencia", adelantando que informará a la FEMP (presidida por el regidor vigués). Rubén Pérez (Marea) criticó que los cambios son "antidemocráticos y obstruyen la labor de fiscalización de la oposición". Caballero, por su parte, asegura que PP y Marea "no se leyeron el reglamento" y mantiene que "mejora el actual y las garantías democráticas son totales". Estos son los principales puntos de fricción sobre la norma, actualmente en trámite.

| Público y cobertura mediática. Sobre las manifestaciones desde el público que alteren el debate la norma actual señala que el alcalde "velará por el mantenimiento del orden" y los asistentes no intervendrán ni harán comentarios de agrado o desagrado, ni usarán instrumentos ofensivos", que no especifica, si bien se entiende que serán aquellos que impidan debatir, caso de silbatos. El reglamento en trámite precisa que el público no podrá portar carteles, algo muy común en la sala, ni pancartas o similares. El alcalde puede prohibir la entrada de dos a cuatro meses a quienes alteren el orden de forma grave. La Policía hará partes de servicio y denunciará si hay conducta penal. Sobre la cobertura mediática de los plenos los dos reglamentos señalan que se facilitará la asistencia de los medios. El actual recoge que para grabar es necesaria autorización del alcalde; el nuevo añade que deben estar "debidamente acreditados" e incide en el permiso del alcalde para grabar. El PP y Marea denuncian restricciones en la cobertura, y Caballero afirma que no habrá ninguna: "Los medios pueden grabar lo que quieran", asegura

| Comisiones de vigilancia. El futuro reglamento elimina la comisión de vigilancia de las contrataciones, y la de seguimiento de la actuación del gobierno. Se mantiene la comisión especial de investigación, la de cuentas y la de reclamaciones.

| Junta de portavoces. Es el órgano consultivo formado por el alcalde y los portavoces de cada grupo. Se reúne con carácter previo a cada pleno, y para las convocatorias extraordinarias la norma actual requiere que lo pidan la mitad de sus miembros. La nueva añade que esta mitad debe trasladarse también a la de ediles de la Corporación a los que representen los portavoces, con lo que la oposición denuncia que el alcalde, que gobierna con mayoría absoluta, puede vetarlas. El regidor señaló ayer que la norma funciona "como en todas las juntas de portavoces del mundo; es la democracia. ¿O quieren que decidan las minorías?".

| Grupo Mixto. La norma vigente sitúa en dos el mínimo de ediles para formar grupo propio. La nueva lo amplía a tres. De no alcanzarse ese número los concejales pasarían al mixto.

| Mociones y ruegos. El reglamento actual señala que las comisiones informativas tratarán y dictaminarán los asuntos que se someterán a acuerdo del pleno; el nuevo señala que pasarán los de tramitación ordinaria. Marea denuncia que esto excluye las mociones. Sobre ruegos y preguntas, ahora son cuatro por grupo y el borrador fija nueve en total a repartir proporcionalmente entre los grupos de la Cámara.