La aprobación de la Ley del Área Metropolitana de Vigo este mandato requiere de pasos ágiles tanto en los catorce concellos como en la Xunta y el Parlamento gallego. El vicepresidente autonómico, Alfonso Rueda, asegura que el objetivo sigue siendo que el texto entre en junio a más tardar en la Cámara para su tramitación. "Si todos somos diligentes, y creo que estamos interesados en serlo, mantenemos los plazos", afirmó ayer durante su visita al antiguo Xeral.

El proceso para pactar los términos de la ley arrancó en julio, cuando el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pactaron desbloquear el Área. El regidor vigués inició en agosto una ronda con sus homólogos del entorno, incluidos los de municipios no integrados en la ley pero que quieren adherirse de inmediato. La Xunta, por su parte, arrancó sus contactos con las 14 corporaciones en octubre para escuchar las opiniones de los grupos municipales.

Caballero organizó varias cumbres de alcaldes en Areal para exponer sus propuestas y recabó apoyos, pero la fase decisiva arrancó el 19 de enero en la primera reunión entre los 14 alcaldes y el vicepresidente de la Xunta. El proceso desde entonces ha sido rápido pese a las diferencias de antemano. En aquella primera cumbre hubo importantes progresos en gobierno, financiación y competencias, que quedaron encauzados. Faltaba el transporte, el punto clave. No fue fácil desbloquearlo pero el 22 de febrero se alcanzó el acuerdo.

Gobiernos municipales, Xunta y grupos parlamentarios deberán pisar acelerador para cubrir todo el trayecto y dar vía libre a la constitución de la esperada Área en verano.