"Parece mentira que a día de hoy, con la necesidad que hay se sigan cambiando de libros de un año para otro y aún encima te obliguen a pagar por ellos". No solo Bertila Fernández, portavoz de Foanpas lo piensa, sino que cerca de 200 personas que se acercaron ayer a recoger algún libro escolar usado ofrecido por esta asociación reconocen que deberían tener más continuidad.

"Lo normal sería que pudiéramos pasarle libros de unos niños a otros de cursos inferiores, pero con los cambios continuos éstos dejan de ser útiles", denunciaban varios progenitores, quienes también consideraban "excesivo" la inversión que cada curso lectivo destinan a este material escolar obligatorio.

VÍDEO | Reparto de libros de texto gratis en Vigo. // E. Villanueva

Bajo estas reclamaciones, miembros de la Federación olívica de asociaciones de nais e pais de alumnos (Foanpas) se congregaron frente a la delegación de la Xunta, en la plaza de la Estrela donde repartieron libros de primaria entre cientos de vigueses. "Vinimos con seis cajas y cerca de 400 libros y en media mañana hemos repartido la mitad, la gente entiende nuestra causa porque afecta a muchos, nadie debería de pagar por los libros de texto", reivindicaba también Mayca Rivas, vocal de la asociación.

Desde Foanpas reconocen que con el cheque que ofrece la Consellería para la compra de material escolar no alcanza para todos los libros que los niños necesitan. "Con ese dinero compran como mucho tres libros, ¿y el resto que?", añadían.

Y es que de ese medio millar de ejemplares, más de la mitad fueron entregados a padres que discurrían por la calle o a docentes sin ejercer que buscan informarse sobre qué estudian los niños hoy en día. Este es el caso de Francisco Nogueira. A este vigués le gustaría estar al día en cuanto al ritmo de estudio de los últimos cursos de la enseñanza obligatoria, por ello solicitó a la asociación que buscase entre sus más de 20.000 ejemplares almacenados, alguno de FP de grado medio para él y otro tanto de Bachillerato para su sobrino.

Aunque sin duda, lo que menos gusta del sistema actual es el cambio constante en cuanto a los modelos o editoriales. "Por mucho que los cuides y los guardes no te valen para otra persona, en el fondo es absurdo. A mi me encantaría dejárselos a otra persona, pero sabes que dentro de un par de años ya no valdrán", afirmaba Cleonice Oliveira. Olalla Guzmán y Antón Pino van un paso más allá solicitando que en las escuelas se "castiguen a los niños que los estropeen".

Cleonice Oliveira

"Guardarlos es absurdo, cada año los cambian". Esta viguesa lamenta que los libros de texto se tiren y no se mantengan guardados, aunque ve lógico que al estar en constante renovación la gente opte por deshacerse de ellos.

Francisco Nogueira

"Busco libros para mi sobrino y de FP para mí". Docente y tío preocupado, Francisco Nogueira solicitó ayuda con libros de Bachillerato para su sobrino y de grado medio para él y estar así en contacto con el nivel de estudios actual.

Olalla Guzmán y Antón Pino

"Se debería penalizar a quienes los estropean". Su propuesta pasa por no estar renovando constantemente las editoriales. Reivindican en uso de un libro de un año para otro y para ello proponen castigos en los centros para quienes los destrocen.