Vigo y comarca acarician ya el Área Metropolitana con las yemas de los dedos. Tras el acuerdo histórico alcanzado el lunes entre los 14 alcaldes y San Caetano, el vicepresidente Alfonso Rueda, avanzó que el Consello de la Xunta podría dar luz verde al nuevo organismo a lo largo de mayo. Con su puesta en marcha, los municipios que integren el organismo -14 en un principio, aunque la vocación del ente es llegar a abarcar 28 consistorios y una población cercana a los 600.000 vecinos- se dotarán de una herramienta única para cohesionar y reforzar el estatus de la comarca, compartir costes y mejorar la prestación de servicios. El organismo amparará el desarrollo de un territorio que, en la práctica, ya comparte numerosas sinergias y un movimiento fluido de vecinos. A continuación se desgranan algunas de las claves del futuro ente metropolitano, si bien habrá que esperar al texto definitivo que ultima la Xunta -con los acuerdos pactados con los municipios- para conocer en detalle sus características.
| Las competencias. El Área nace con la vocación de aunar recursos y esfuerzos para abaratar costes y mejorar la prestación de servicios a los ciudadanos. ¿Cómo? Asumiendo competencias, entre las que destacan el transporte público y la movilidad, la promoción económica o el empleo y los servicios sociales. El futuro organismo tendrá entre sus áreas de actuación el turismo y la promoción cultural, la prevención y extinción de incendios, Protección Civil y Salvamento o los ámbitos del medio ambiente y la gestión de los residuos. La ordenación territorial o la cooperación urbanística serían otras de sus competencias.
| El transporte. Entre esas "funciones", una de las que mayor beneficio reportará a los vecinos del Área es el transporte. Despejar y acordar los detalles de cómo se prestará, quién lo coordinará, qué servicios se incluirán entre las responsabilidades del organismo... Fue uno de los grandes retos que tuvieron que encarar Xunta y concellos. De hecho, fue la última cuestión en acordarse y estuvo a punto de condenar la puesta en marcha del ente metropolitano. La solución que finalmente consensuaron San Caetano y los consistorios es simple: el Área se encargará del transporte interurbano; Vigo mantendrá su competencia sobre Vitrasa. La coordinación entre ambos servicios -dónde parará, por ejemplo, el bus que viene de O Porriño; o hasta dónde llegará Vitrasa- dependerá de un comité en el que estarán presentes los 14 concellos, la Xunta y -con voz, pero sin voto- Aena, Renfe, Adif y Diputación. Otro acuerdo clave fue que Vigo se compromete a integrarse "a fondo" en el actual plan de transporte metropolitano. Y "sin límite de usuarios", anotó Caballero. El Área nace con la voluntad de elaborar sin embargo su propio plan de movilidad, que tendría que aprobarse en la Asamblea.
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| Órganos de dirección. Otro de los aspectos que requirió de una intensa negociación fue el gobierno del Área. El ente metropolitano dispondrá de dos órganos directivos principales: la Asamblea y la Junta. La institución estará encabezada además por un presidente. La Asamblea será el máximo órgano de representación y el peso de cada ayuntamiento en su seno lo determinará su propia población. Por ejemplo, en el Área de 14 municipios Vigo -con el 61% de la población total- tendrá 23 representantes de 54, en torno al 42,6%. En la Junta el voto será ponderado, un detalle que difiere de forma sustancial de la Ley del Área de 2012, que asigna un voto a cada consistorio. Según concretó Caballero, las decisiones se adoptarán con el 50% de los votos ponderados y el respaldo de al menos cuatro consistorios. En lo que respeta al presidente, este será elegido por la Asamblea, órgano en el que Vigo goza de un peso importante, que no le exime no obstante de buscar consenso.
| La financiación. Las competencias que asumirá el Área se transferirán con toda la financiación correspondiente. Así mismo, cada uno de los consistorios que se integren harán una aportación per capita que fijará la Asamblea a propuesta de la Junta de Gobierno. El dinero permitirá costear la estructura del futuro organismo.
| Voluntario y coordinado. Uno de las máximas que se han marcado Xunta y concellos es la "voluntariedad", un término que se repitió en varias ocasiones a lo largo de las últimas cumbres celebradas entre los regidores y San Caetano. ¿En qué consiste? En que cada consistorio cederá competencias de forma voluntaria y dispondrá de "flexibilidad" en el proceso de integración. A su vez el Área asumirá competencias de forma gradual, en función de un calendario aprobado por la Asamblea. Entre los acuerdos alcanzados a lo largo de los últimos meses entre los alcaldes y el Ejecutivo gallego destaca también la creación de un comité de cooperación que se encargará de "coordinar" la labor de las administraciones en el ámbito del futuro ente metropolitano, por ejemplo con la Diputación de Pontevedra.
