| La Policía Local acordonó ayer un pequeño tramo en la confluencia de las calles San Roque y Avenida de Madrid tras desprenderse rocas de un lateral de la finca de San Roque. Las piedras cayeron al lado de la fuente situada justo en la esquina, frente a la calle Loureiro. A lo largo de las últimas semanas la ciudad ha registrado fuertes precipitaciones y rachas de viento.