El Valedor do Cidadán, Luis Espada Recarey, comunicó ayer al presidente de la Asociación Galega de Ambulantes e Autónomos (AGAA), presidida por Jesús Francisco Romero Alvite, la apertura de un expediente relativo a las preguntas registradas por los feriantes sobre su situación, así como sobre la suspensión de los mercadillos en la ciudad de Vigo.
El expediente se refiere a diez preguntas relativas a los puestos y vendedores ambulantes, que remitieron por escrito al alcalde, Abel Caballero, reclamando el cumplimiento de la Ley de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno. Entre ellas se incluyen cuestiones sobre el número de puestos ambulantes que trabajaban en los mercadillos de Bouzas, Coia y San Cosme, cuántos de ellos exponían su autorización municipal, y si se controlaba que todos cumplían con la ordenanza vigente. Además, se cuestiona cuánto se les cobraba a los ambulantes por ocupar espacio público y dónde se ingresaba la recaudación.
Finalmente, preguntan si el alcalde "aún considera una pérdida de tiempo reunirse con los trabajadores afectados de una injusta e inútil suspensión de los mercadillos, a sabiendas de que está perjudicando a ciudadanos que tienen como único medio de vida la actividad legalmente reconocida" del comercio ambulante.
Los mercadillos llevan sin celebrarse tres meses desde que se produjo un enfrentamiento con armas de fuego entre colectivos de etnia gitana que acabó con un herido de bala. Desde entonces, ambulantes de Coia y Bouzas han reclamado la reapertura de los mercadillos y han pedido reuniones con el alcalde.
Alvite, reconoce sentirse "decepcionado" ante la continuación de la suspensión de las ferias a pesar de que se haya archivado el caso de los tiroteos. "Tememos que el cierre sea de por vida", asegura.
