Las fuertes rachas de viento y la lluvia persistente mantuvieron ayer toda la costa gallega en nivel naranja, una situación que se mantendrá a lo largo de hoy, jornada para la que se esperan intensas precipitaciones. Ayer destacaron en especial las fuertes ráfagas de viento, con valores por encima de los 80 kilómetros por hora.

La estación de Meteogalicia ubicada en el puerto registró, por ejemplo, rachas máximas de 82,2 km/h, que se vieron incluso superadas por las anotadas en el observatorio de Illas Cíes, donde el viento llegó a alcanzar los 83,2 km/h. A lo largo de la jornada también llovió, aunque con menos intensidad que el viernes. La estación meteorológica del puerto registró 8,6 litros por metro cuadrado.

Debido a la intensidad del viento los bomberos tuvieron que asegurar ayer un edificio ruinoso, con grietas y deshabitado situado en la calle Colón. Los bomberos decidieron la pasada madrugada apuntalar la estructura de urgencia y diferentes profesionales estuvieron asegurando los dinteles del inmueble, de cuatro plantas. Durante los trabajos estuvieron presentes los propietarios del edificio y el arquitecto municipal.

También a consecuencia del viento los bomberos tuvieron que trasladarse a un aparcamiento de Jacinto Benavente, donde se había soltado una chapa. Antes los efectivos anti incendios se trasladaron también a un puente del Lagares para retirar la maleza y ramas que se habían atascado en uno de sus arcos y dificultaban el paso del agua. Los bomberos dieron aviso a una grúa para que quitase la maleza más difícil de alcanzar. A lo largo del día se movilizaron también por una torreta de luz medio caída y para retirar un avispero.