El alcalde, Abel Caballero, se mostró ayer satisfecho con la fórmula elegida por la Xunta, a través de la modificación de la Lei do Solo, para desatascar los proyectos clave que ha paralizado la anulación del Plan Xeral. "Si se confirma es una buena cooperación y una medida muy conveniente para la ciudad", señaló en una nota emitida por su gabinete.

Caballero considera que la solución quedaría "encaminada" y afirma que "esto ayudará a desbloquear temas fundamentales para Vigo en un corto plazo de tiempo, minimizando así los efectos colaterales de la anulación del Plan".

El alcalde mantuvo una reunión con la conselleira Beatriz Mato el 2 de diciembre, al poco de conocerse la sentencia del Supremo, y acordaron colaboración mutua para minimizar el impacto del fallo judicial. Posteriormente el alcalde se mostró crítico con el resultado de la primera reunión técnica entre el Concello y la consellería al desechar el departamento autonómico la vía supramunicipal para los proyectos estratégicos. En su valoración de ayer el regidor, a expensas de conocer la redacción definitiva, dio por buena la fórmula jurídica y urbanística elegida por la Xunta, ya que "supone la plasmación de lo tratado en la reunión con Mato", puntualizó.

Caballero pidió también a los grupos políticos del Parlamento gallego que, una vez conocida y estudiada la propuesta, le den su apoyo a esta modificación de la Lei do Solo.

Paralelamente, el Concello continúa con la tramitación del nuevo Plan Xeral iniciada el 17 de diciembre en la junta de gobierno local y ratificada al día siguiente por el pleno de la Corporación.

El alcalde reiteró que la filosofía es mantener el modelo y estructura del Plan Xeral de 2008 y "conseguir que la aprobación definitiva se realice en un tiempo breve". Caballero dijo confiar en contar con la cooperación de otras administraciones "para dejar prácticamente reducidos a cero los efectos colaterales negativos de la anulación del PXOM por parte del Supremo".