El atasco aún es elevado, pero los avances para atenuarlo ya son evidentes. La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, la única sala de Vigo especializada en civil y que por su gran carga de trabajo llegó a convertirse en la más colapsada de España entre las de su materia, ha logrado reducir en un período de seis años en casi un millar su voluminoso número de asuntos pendientes. Desde la cifra récord de 1.660 recursos a la espera de ser tramitados y resueltos que se alcanzó en 2009 se ha pasado a los 675 actuales. Un número que sin embargo sigue siendo alto, como lo demuestra el hecho de que duplica la media gallega y está un 50% por encima de la española. Precisamente por este motivo el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acordó ayer prorrogar la labor del juez que realiza funciones de apoyo en esta sección dotada de cuatro magistrados titulares.
El magistrado de refuerzo, Eugenio Francisco Míguez Tabarés, lleva ya más de cinco años en la Sección Sexta -inicialmente hubo un segundo juez de apoyo- y seguirá en este destino al prolongar el Poder Judicial la comisión de servicio con relevación de funciones que desempeña. Una demanda unánime de la judicatura viguesa, que cuenta con el aval del órgano de gobierno de los jueces, es que el refuerzo se acabe convirtiendo en una plaza de magistrado titular, lo que compete al Ministerio de Justicia.
Creada en 2001, la Sección Sexta se especializó en civil en 2004. Y el alto volumen de recursos que asumió desde entonces, a un ritmo de más de un millar por año, originó un colapso que alcanzó sus cotas máximas en 2009, cuando en sus estanterías y archivos llegaron a acumularse más de 1.600 causas sin resolver, un atasco sin precedentes en Vigo.
Evolución
La situación ha mejorado. El último boletín estadístico, según informa el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, revela que este pasado junio los asuntos sin resolver habían bajado a 675. Un análisis comparativo arroja, en todo caso, que aún son demasiados expedientes: la pendencia media en Galicia en salas de la misma materia es de 307 casos, mientras que la nacional se sitúa en 448.
Y si la Sección Sexta siempre destacó en cuanto a asuntos pendientes de resolver, también lo ha hecho por su alta productividad. En 2014 este órgano se situó entre las diez salas civiles de Audiencia de España que dictan más sentencias. Y este año no se bajó el ritmo: entre enero y septiembre sus magistrados dictaron 450 fallos, por encima de la media de la provincia de Pontevedra -346- y de la de toda España -327-. Una dinámica de trabajo que se traduce en que a fecha de 1 de octubre, y con respecto a los recursos sobre los que ya se había deliberado, sólo había 11 pendientes exclusivamente de sentencia, todos de menos de tres meses.
La sala de Vigo asume más pleitos que cada una de las dos civiles de Pontevedra. La entrada de casos sólo bajó tras la implantación del tasazo de 800 euros que se exigía para recurrir, pero su eliminación para los ciudadanos en marzo de este año apunta a que las cifras volverán a crecer.
