Tener temperaturas cercanas a los 20 grados en esta época del año y disponer de varios días festivos no se tradujo en turistas y visitantes a Vigo.
El sector hostelero afronta el puente de la Constitución con una ocupación que apenas ronda el 45%. Las previsiones ya no eran muy halagüeñas antes del inicio de los festivos nacionales, pero una vez entrado de lleno en el fin de semana, los datos no han hecho más que confirmar esta situación.
Este comienzo de otoño ha sido uno de los más fructíferos para el sector. Tras el mejor agosto del último lustro gracias a la llegada masiva de cruceristas, un tiempo no azotante y diversos eventos, los hosteleros arrancaban los meses de octubre, noviembre y diciembre con las expectativas altas. Octubre se saldó con unos datos bastante buenos para la época del año, sin embargo noviembre ha supuesto un bajón importante que el puente de la Constitución no ha sabido atestar.
Según estimaciones que maneja el gremio, y contando el puente desde el comienzo del fin de semana hasta el martes, el día que registra mejores datos de pernoctación en los diferentes hoteles de la ciudad fue ayer sábado. "Esta es la única jornada que si no al cien por cien, si rozaremos una ocupación bastante alta, pero para el resto de días nada, entre un 35-45% como mucho", explican desde el Hotel Ciudad de Vigo.
Pocas actividades y eventos
Mismo discurso sino parecido desglosan desde el Hotel Palacio Universal. Su ocupación a lo largo de estos días festivos en ningún momento superará el 50%, cifra que por otra parte tampoco extraña a trabajadores del sector, aunque sí esperaban que el buen tiempo animara un poco más al turismo. "Llegados a esta época, Vigo no ofrece tantas escapadas o eventos como otras ciudades. Durante verano y principios de otoño aún tuvimos movimiento, pero ahora ya no hay tanto que hacer ni una gran atracción que llame a la gente", añaden.
El presidente de la Federación de Hostelería de Pontevedra (FEPROHOS), César Sánchez-Ballesteros reconoce que los profesionales del sector tienen la mirada puesta en las Navidades. "Empezamos el puente sin muchas previsiones y al final nos encontramos con esta realidad. Hubo el sábado un poco más de movimiento pero el resto de días festivos bastante mal, señalo como mucho un 40-45% de ocupación", comenta Sánchez-Ballesteros, quien añade que "la mayoría de turistas con los que cuenta ahora mismo Vigo son nacionales, pero de sitios muy cercanos. Para cuatro días festivos, a la gente de Madrid u otras comunidades no les compensa coger el coche para venir hasta aquí. Al ser escapadas de corta duración, la distancia entre la que hacen turismo también lo es".
A pesar del poco éxito logrado en este puente, las esperanzas puestas en Navidades son máximas. "Ya vemos que empiezan a realizarse las primeras reservas hoteleras, los trenes y aviones se llenan y eso provocará un movimiento de gente muy interesante", declara el presidente de la asociación de empresarios del hospedaje en la provincia.
Saben, tanto hoteles como locales de restauración que las cenas de empresa y demás eventos navideños son un plus muy importante para el sector, por ello empiezan ya a trabajar con la mirada puesta en estas jornadas. "Está claro, o eso esperamos, que a mediados y finales de mes tendremos unos niveles de ocupación mucho mayores, y ya no solo en el sector hostelero, sino mismo los restaurantes, bares, terrazas, recuperarán sus buenas cifras", explica.
A pesar de esta positividad, Ballesteros reconoce que en diciembre tienen un fin de semana con el que no cuentan. "El del 19 y 20 de este mes, por motivo de las elecciones, ya lo damos por perdido", concluye.
