El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, entiende los cambios desvelados el miércoles en el equipo directivo del área sanitaria viguesa como la apertura de "una nueva etapa" para "ir más rápido en el acoplamiento de las estructuras y servicios", así como en la "normalización plena" del Hospital Álvaro Cunqueiro.

El jefe del Ejecutivo gallego, que anunció esta remodelación la semana pasada, insistió en que el relevo al frente de la Consellería "supone cambios en los equipos organizativos del Sergas y, muy concretamente", en el nuevo hospital de Vigo. Eludió responder si estos ceses suponen un reconocimiento de que no se actuó correctamente en la gestión de la apertura al Álvaro Cunqueiro.

Admitió, sin embargo, "problemas" que vinculó al enorme volumen del traslado y la unificación de dos maneras de trabajar, la del Xeral y el Meixoeiro. "Nadie oculta los problemas que sufrió el hospital como consecuencia de l traslado de seis mil profesionales y la fusión de muchos servicios de hospitales que funcionaban de forma distinta", defendió. Señaló que ante estas "dificultades" hay dos posibles reacciones. "Seguir trabajando para que funcione mejor o criticar su funcionamiento". "Sin duda", Feijóo apuesta por la primera.

A los siete directivos del área viguesa salientes les agradeció que realizaran "el traslado más dificultosos" de los que se han realizado en el Sergas. Sobre los nuevos, destacó su vinculación personal y profesional con la zona de Vigo y detalló que trabajaron en puestos de responsabilidad en Atención Primaria u hospitalización en el Xeral o el Meixoeiro.