Cada día se dicta una media de siete sentencias en la provincia de Pontevedra relacionadas con delitos contra la seguridad vial. Éste es el balance que se desprende de la memoria de la Fiscalía de Tráfico de Pontevedra hecha pública a ayer. El último ejercicio se cerró con un total de 2.500 delitos de tráfico. Más de la mitad fueron a conductores que conducían su vehículo superando la tasa de alcohol permitida y, en algún caso, aunque los menos, tras haber consumido drogas (1.547). Le siguieron, por número de resoluciones judiciales, los pilotos sorprendidos sin permiso de circulación (833); las negativas a realizar las pruebas de alcoholemia o drogas (65); la conducción temeraria (45); los excesos de velocidad (7) y la creación de otros riesgos para la circulación (3).
En el capítulo de excesos de velocidad, la Fiscalía de Tráfico de Pontevedra avisa de una problemática como la de tener que haber pedido el sobreseimiento por la negativa del propietario a identificar al conductor del vehículo con el que se cometió el delito. La multa es en este caso una sanción administrativa que puede llegar a los 1.500 euros.
Por otro lado, la Fiscalía vuelve a incidir en su memora en la necesidad de crear más plazas de trabajo para cumplir penas. "Se sigue echando de menos en días festivos o fuera del horario laboral, pues en muchas ocasiones no es posible encontrar para el penado una plaza idónea de cumplimiento al tener que respetar sus obligaciones laborales", apuntan.
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En el apartado de atropellos también pone el acento. En 2014 -señala- hubo dos fallecidos. "No deja de ser preocupante que los dos sean personas de más de 60 años y ello supone una llamada de atención [...]. Sobre ellas [las personas mayores] se deberían adoptar medidas específicas de protección ante el tráfico", plantea.
La Fiscalía de Tráfico de Pontevedra destaca también en su balance que en los dos últimos años se dictaron las dos primeras y únicas sentencias en Galicia por manipulación de tacógrafos.
