El alcalde de Vigo, Abel Caballero, aprovechó ayer su intervención en el Fórum Europa para defender el papel "clave" que debe jugar el Área Metropolitana en el futuro de la comarca. Ante empresarios, políticos y representantes de instituciones, el regidor presentó el organismo como un "ente de vertebración y de gestión" necesario, sin el cariz de "núcleo de poder" que -lamentó- le atribuyen sus "enemigos"."Algunos quieren ver el Área como un un contrapoder. Les asusta. Y es un temor infundado porque Vigo jamás la planteó como un contrapoder. Lo que queremos es tener nuestra propia capacidad de desarrollo".

"El Área es un hito y una oportunidad histórica. Va a cambiar la dinámica del territorio y marcar una nueva Galicia, mejor que la anterior. Es el ámbito de desarrollo que necesitamos. No es una opción ni un capricho, la vertebración avanza imparable ya, pero sin planificación ni coordinación", aclaró el alcalde: "El tejido industrial comparte implantación en distintos concellos y eso necesita coordinación. Lo que reclamamos es esa capacidad".

Durante su discurso, Caballero acusó a la Xunta de Galicia y a su presidente, Alberto Núñez Feijóo, de "boicotear" el Área y "reventar" el consenso en 2012 -cuando se aprobó la Ley del organismo actual, que no llegó a cristalizar- con una "enmienda antidemocrática". "Quienes la están intentando paralizar y boicotear son precisamente porque la ven como un contrapoder".

Para relanzar el Área, el regidor defendió un modelo con voto ponderado, principio que se aplica "en todos los organismos, empresas y entidades en función de su tamaño y aportación". Como ejemplo apuntó que no puede "pesar" lo mismo un sufragio de Vigo, que aportaría el 62% de la financiación y roza los 300.000 vecinos, que Pazos, cuyo padrón ronda los 3.000 habitantes e inyectaría muchos menos recursos.

Caballero -que ya ha remitido una propuesta a la Xunta y el resto de consistorios de la comarca- defendió que en el organismo no habrá "imposición". "No queremos imponer nada; las decisiones deberán ser apoyadas por al menos cuatro ayuntamientos", argumentó el regidor, quien destacó la "generosidad" de Vigo, que pese aportar el 62% ostentaría -en el Área de 14 municipios- el 45% de representatividad. Otro mensaje que recalcó es que el ente no "va a practicar injerencias en los asuntos particulares de cada concello. Cada alcalde seguirá gestionando su municipio".

Durante su intervención, se mostró optimista sobre las últimas gestiones y contactos con otros regidores para desatascar el Área y valoró que -tras lo ocurrido en 2012- "estamos de nuevo en la reconstrucción" del organismo. "Pero los adversarios siguen haciendo el mismo papel", lamentó Caballero, para quien el nuevo ente "tendrá tantas consecuencias que tiene muchos enemigos".

Abogó también por crear un Área que será "clave" en el desarrollo de la comarca durante los próximos 50 años, que ocupará un lugar "privilegiado" a ojos de la Unión Europa (UE) por su ubicación fronteriza entre España y Portugal y que se expandirá en el futuro. Así, a los 14 ayuntamientos que ya contempla la ley de 2012 quiso sumar los que a lo largo de los últimos meses han mostrado su deseo de sumarse, lo que eleva el total a 22. El objetivo no se quedaría ahí, sin embargo, ya que pasaría por aglutinar 28 localidades. "El Área es el ámbito de desarrollo que necesitan 600.000 personas", remarcó el regidor olívico.

Su defensa del organismo supramunicipal fue, sin embargo, más allá del caso concreto de Vigo. Quien ocupa la presidencia de la Federación Española de Municipios y Provincias (Femp) apostó por esta figura administrativa como la "vía" para el futuro, frente a las pretendidas fusiones de localidades, una "canción que llevo escuchando desde hace 25 años" -criticó Caballero- y de la que solo hay un caso, el de Oza-Cesures, que "está mal, incompleta y parada".

Sobre el transporte interurbano, Caballero insistió en que es "competencia exclusiva de la Xunta", por lo que debe ser esta la que "pague todo". "Es un abuso obligar a los ayuntamientos", enfatizó el regidor, antes de valorar las líneas como "muy deficientes". "El Área necesita una ciudad del transporte, donde los camiones puedan operar; ahora es el puerto, y no puede ser". También en materia de movilidad, advirtió sobre una "segunda oleada de ataques" contra Vigo por la "inquietud" que genera el aterrizaje de Ryanair.

Buena parte del discurso de Caballero se centró en la defensa de los ayuntamientos y el modelo que puede aportar Vigo, que quedó refrendado por las urnas en mayo: "Se demanda coparticipación, no solo cercanía. El resultado del 24-M no es un resultado del PSOE ni de Caballero, sino del modelo político".

El regidor remarcó la "estabilidad" de Vigo y su solvencia financiera, clima que contrapuso con la "inestabilidad" de Madrid, Barcelona, Valencia, Santiago o A Coruña. "No queremos ser de las ciudades rebeldes, sino capitalizar a las previsibles, gobernables y dialogantes", abundó. Poco antes, durante su presentación, la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, destacaba de Caballero su trabajo para "lograr que Vigo ocupe el lugar que le corresponde".

Al foro acudió, entre otros, el rector, Salustiano Mato; el presidente de la patronal gallega, José Manuel Fernández Alvariño; el de la Cámara de Comercio, José García Costas; el del CFV, Juan Ramón Güell; o el secretario del PSdeG, Gómez Besteiro.