La investigación del tiroteo entre dos clanes gitanos en el túnel de Valladares el pasado 21 de octubre se complica por la falta de detalles aportados por los testigos. Las personas llamadas a declarar a Comisaría coinciden en no recordar bien los hechos y optan por no identificar a los implicados. Por el temor a que el enfrentamiento se reactivara, desde un primer momento se estudia la opción de recurrir a la figura del testigo protegido. Las pesquisas continúan mientras el Concello ha decidido que este domingo no se vuelva a celebrar el mercadillo de Bouzas, decisión criticada por los ambulantes.