Los comuneros de Coruxo alquilarán una trituradora para completar el tratamiento sobre las palmeras atacadas por la plaga del picudo rojo que sólo en el municipio de Vigo ha arrasado decenas de ejemplares.

Los restos de estos árboles muertos se están trasladando a un "punto verde" autorizado por el Concello de Vigo ubicado en el ámbito forestal de esta parroquia viguesa. Pero su almacenamiento en superficie cada vez reduce más el espacio disponible en una finca que recibe toda clase de residuos vegetales. Además, sólo con la tala no se frena la expansión del Rhynchophorus ferrugineus. Como publicó este periódico, el voraz gorgojo ya aniquiló un elevado número de palmeras del municipio vigués y los operarios encargados del cuidado de los jardines ya no se atreven a cuantificar cuántas estarían enfermas. Para las de corona alicaída y hojas casi amarillentas no hay solución, porque es el síntoma de su muerte irreversible. Otras, en cambio, pueden acoger al escarabajo dentro sin que el ejemplar exprese los estragos hasta años más tarde. No hay un método infalible para combatirlo y todos son muy caros, del orden de 1.000 euros por árbol. La Xunta recomienda talar, triturar y enterrar.

Son las indicaciones que en las últimas horas los servicios autonómicos reiteraron a los comuneros de Coruxo. "Ante el creciente problema que representa para concellos y particulares de Vigo y de su área hemos decidido poner en marcha un servicio con el único ánimo de colaborar con quienes tengan árboles tocados por esta plaga sin solución.", afirma su presidente, Antonio Ocampo.

Estos comuneros cuentan con una "Bio 900", una máquina trituradora muy potente que admite secciones de hasta 30 centímetros que resulta insuficiente para el tamaño medio de una palmera. De ahí la necesidad de alquilar una infraestructura capaz de tratar troncos de mayor holgura y a un ritmo de trituración superior a los 20 metros cúbicos por hora. Ocampo asegura que ya han elegido la maquinaria y que ésta comenzará a funcionar en 15 días.

Por este servicio cobrarán una tarifa que todavía por fijar no será inferior a 50 euros por ejemplar. Con el material derivado de la trituración los comuneros se plantean dos alternativas: hacer compost o biomasa. De ambas podrían sacar un rendimiento económico si bien conllevaría su transporte en contenedores desde Coruxo hasta recintos especializados situados fuera del municipio vigués.

Entretanto, a su "punto verde" siguen llegando palmeras arrasadas por el picudo rojo. En la última tanda fueron seis ejemplares. El presidente de los comuneros avisa que no aceptarán más hasta que comience a funcionar la trituradora.