El subdirector de Procesos sin Ingreso del área sanitaria de Vigo, el doctor Juan Lázaro Anguís, comunicó el pasado viernes a sus superiores su deseo de abandonar el cargo. El directivo responsable de las urgencias trasladó esta petición el día en que iniciaba un período de vacaciones, pendientes este año debido al traslado al nuevo hospital de Vigo. Así, la Gerencia del Sergas en Vigo desmiente que "a día de hoy" haya dimitido y resalta que solo está de descanso.

La petición de relevo llega cuando no se ha cumplido ni un mes desde la puesta en marcha de las urgencias del Álvaro Cunqueiro, que concentraron las antiguas del Xeral y del Meixoeiro. Desde el principio, las denuncias por los problemas en el servicio han sido una constante. Sin embargo, fuentes próximas señalan que es algo que ya lleva pensando y comentando a sus superiores varios meses. Otras fuentes hospitalarias añaden que no es el único que, desde hace un tiempo, ha manifestado su voluntad de abandonar su puesto directivo cuando le puedan encontrar un relevo. La preparación del traslado y la apertura del nuevo hospital ha sido un periodo especialmente duro y varios responsables se han confesado "quemados".

En concreto, trabajadores y sindicatos destacan que, en los últimos días, percibían "muy cansado" al subdirector de Procesos sin Ingreso. Las urgencias de Beade se estrenaron con atascos, principalmente, por la espera para pruebas de radiología. Con el paso de los días, se acumularon las protestas por descoordinación de los dos servicios recién fusionados y por escasez de personal. También fue él el que tuvo que dar la cara ante los sindicatos por la fuga de fecales que la semana pasada se produjo frente a los boxes de reanimación y ante el ascensor que conecta las urgencias con los quirófanos.

En el servicio de Urgencias, en particular, la del doctor Lázaro Anguís sería la segunda salida de un puesto directivo desde su puesta en funcionamiento. La primera dimisión fue la de José Antonio Rey González, tras más de quince años como supervisor de Enfermería del servicio en el Meixoeiro. En su misiva de despedida, explica él mismo a sus compañeros que el motivo de su decisión "se debe única y exclusivamente a discrepancias con la Dirección y la tardanza en tomar una decisión durante meses con respecto al organigrama y la responsabilidad de la Enfermería" de las nuevas Urgencias fusionadas. Rey González entiende que un servicio tan grande -de más de 70 enfermeras y 50 auxiliares- debe tener al frente un responsable de área y no un supervisor. Ni mucho menos, dos. Para evitar la "bicefalia" en la que estaban trabajando -con la del Xeral- se va. Él mismo desvincula su decisión de los problemas que está sufriendo el servicio en su arranque.