La Guardia Civil celebró ayer el día de su patrona, la Virgen del Pilar, con un acto institucional al que asistieron diferentes autoridades de la ciudad. Entre ellos, el alcalde Abel Caballero; varios ediles, como Carlos López Font y Elena Muñoz; el juez decano de Vigo, German Serrano; la fiscal jefa, Susana García-Baquero; así como responsables del Instituto Armado y otras instituciones. Durante el acto la Guardia Civil otorgó una distinción especial al Concello de Vigo por el apoyo y colaboración que le presta.

El distintivo lo recogió Caballero, quien aseguró durante su intervención sentirse muy "emocionado" y destacó el "aprecio" de la ciudad a la Guardia Civil, institución de la que destacó su "cercanía". "Su presencia en Vigo es importante", subrayó el regidor, quien agradeció el papel del Instituto Armado en la urbe, el aeropuerto y el puerto.

Durante la ceremonia, que se celebró en el cuartel de la calle Sevilla y al que asistieron cerca de 300 personas, el Instituto Armado impuso cruces de la orden del mérito con distintivo blanco a un sargento del Seprona en Vigo y otro de O Porriño y a agentes del cuerpo de protección del medio ambiente en la ciudad. Otro agente de la Benemérita en el aeropuerto de Peinador fue condecorado también con la cruz del mérito militar.

Además de autoridades y miembros de la Benemérita, en el acto había familiares y amigos, hasta sumar aproximadamente 300 asistentes. Durante la ceremonia el comandante jefe de la Guardia Civil en Vigo, Óscar Grañas, destacó el papel de la institución, de forma especial en "tiempos de crisis", cuando "los más débiles ven en nosotros una cara amiga y no podemos fallarles". Una vez finalizado el acto los asistentes disfrutaron de un vino español. Antes, al mediodía, se había celebrado una misa en la Concatedral de Santa María.

Por otra parte, el Instituto Armado celebró también un acto en Pontevedra para homenajear a su patrona. Durante la ceremonia se recordó a las víctimas de l doble homicidio de Moraña, en el que las niñas Amaya y Candela fueron "asesinadas cruelmente" -tal y como señaló el coronel Miguel Estévez Lara- "a manos del que debería ser en teoría su protector, su propio padre". El mando máximo de la Guardia Civil en la provincia también tuvo palabras para Beatriz y Sergio, las dos víctimas del crimen cometido el pasado verano en Arbo. Ambos vecinos -señaló el alto mando de la Benemérita- perdieron la vida "de forma cruel, incomprensible y cobarde". Estévez reconoció que ambos crímenes hacen de 2015 un año "desgraciado".