Sobre las cenizas de un hospital antituberculoso, la Diputación de Pontevedra levantó en 1975 un centro que iba a revolucionar el concepto de la asistencia pública psiquiátrica en Galicia. "Un centro moderno y humanizado, lejos de la antigua imagen del manicomio. No hay tapias ni rejas y sí constantes indicadores de salida. Un equipo joven al servicio de una psiquiatría actual y muy efectiva". Así describía FARO el Hospital Rebullón en sus primeros años de funcionamiento. Fue en el 76 cuando recibió a su primer paciente en régimen de internamiento. Hoy, junto al de Conxo, es el único hospital psiquiátrico que queda en la comunidad -si bien, el Sergas habla de ellos como unidades re rehabilitación integradas en el servicio de psiquiatría del complejo-.

En los alrededor de 17.000 metros cuadrados construidos del edificio principal cuenta, entre otras cosas, con cuatro unidades de hospitalización y plazas para 68 ingresados. Los alrededor de mil metros cuadrados del antiguo edificio de dirección y la casa de los médicos, será reutilizado por Cogami, que ya cuenta con dependencias en el recinto desde 2001. Además hay una base de ambulancias del 061 y una nave industrial que se emplea para archivo, de unos 5.000 metros cuadrados. Todo rodeado por seis hectáreas de parcela.