La Policía Local acometerá una de las mayores renovaciones de flota de su historia coincidiendo con el arranque de 2016. De una tacada se incorporarán a su parque móvil al menos 17 nuevos vehículos que sustituirán a otros tantos que se jubilarán tras haber cumplido cuatro años y medio. Pero a estos fichajes, y según se recoge en el contrato de renting que acaba de licitar el Concello por un millón de euros, se podrían sumar hasta otros cinco automóviles usados -con menos de 200.000 kilómetros y cinco años de antigüedad- y que tendrán que tener coste cero para las arcas municipales. Solo por la cesión de estos vehículos a mayores se concederán 23 de los 100 puntos posibles que las empresas suministradoras pueden obtener como máximo.

Este contrato se centra en las unidades más "castigadas" por la labor diaria de la Policía Local: los coches patrulla. El gobierno local decidió por primera vez en 2011 mejorar su parque móvil a través de un contrato de renting, en lugar de adquirir los vehículos en propiedad, como venía siendo habitual hasta entonces. Y los buenos resultados de esta modalidad en régimen de alquiler le ha llevado a repetirla. De los 17 nuevos vehículos que tendrán que ofertar las empresas interesadas deberá haber 12 turismos patrulleros (función que desempeñan ahora los Citroën C4 que se jubilarán). De ellos, cuatro tendrán que disponer de kit de traslado de detenidos. La propuesta tiene que incluir también un furgón para el servicio de Atestados, y dos para el Grupo Operativo de Apoyo (GOA) encargado de la seguridad ciudadana y que se creó en el año 2013. Finalmente, la adjudicataria tendrá que poner a disposición del cuerpo local de policía dos todoterreno que se destinarán a la Unidad Medioambiental de Intervención Rural (UMIR).

Con este nuevo contrato, que deberá entrar en vigor en enero de 2016, se quedarán fuera de la circulación los 18 turismos que forman parte del que expira este año. Si bien es cierto, dos de ellos quedaron ya "fuera de juego" en estos cuatro últimos ejercicios por sendos siniestros: uno tras caerle un árbol encima en la calle Manuel de Castro durante un temporal; y otro, tras un accidente de circulación. Aunque el contrato de renting actual y futuro tiene la ventaja de que es la empresa adjudicataria la que debe encargarse de cualquier reparación del vehículo -incluso de aquellas por los daños ocasionados durante el desempeño de la labor policial, como una persecución, por ejemplo- no se incluye sin embargo la obligación de reponer una unidad en caso de que quede inutilizada. "Encarecería mucho el precio de licitación. Además, no es habitual que perdamos coches", justifican fuentes oficiales de la Policía Local.

Además de las ventajas que tiene este sistema en cuanto a mantenimiento y reparación de los vehículos, para lo que se fija un plazo máximo de siete días en los casos más graves y posibilidad de coches de sustitución, los seguros a todo riesgo corren también a cargo de la adjudicataria, así como prácticamente todo el material con el que deben venir dotados los coches, como pueden ser elementos tan básicos como conos, linternas, extintores, martillo para rotura de lunas, botiquín o palancas mecánicas tipo "para de cabra", entre otros muchos.

Las empresas interesadas en renovar el parque móvil de coches patrulla de la Policía Local podrán presentar su oferta hasta el 29 de octubre. El contrato tendrá una duración de cuatro años con posibilidad de una prórroga de nueve meses.