Las aguas de la ría sirvieron ayer de campo de pruebas para que el remolcador Ria de Vigo probase sus nuevos equipos anticontaminación. Durante toda la mañana y hasta las cuatro de la tarde, este buque y otro remolcador desplegaron una barrera de las que se emplean para rodear los vertidos de manera que el Ria de Vigo practicase con los sistemas que acaba de incorporar, entre ellos, uno específico para la succión de hidrocarburos. Este remolcador está fletado por la Xunta y la EMSA, la Agencia Europea de Seguridad Marítima, con sede en Lisboa.