Tras abandonar la presa de Eiras el agua recorre un largo camino de cerca de 30 kilómetros desde Fornelos de Montes hasta Vigo. El itinerario atraviesa una extensa tubería de acero que llega hasta O Casal, donde se encuentran la planta depuradora. En la década de los 90 se renovó la canalización y modificó su trayectoria en buena parte del recorrido: se conservaron cerca de 10 kilómetros y se recurrió a un túnel para evitar los problemas de deslizamientos en la ladera. La antigua canalización dio lugar a lo que hoy se conoce como Senda del Agua, una larga ruta que ronda los 40 kilómetros y que es recorrida cada semana por buen número de senderistas y ciclistas de Vigo y comarca.

Durante el recorrido los paseantes pueden disfrutar de vistas únicas, como la que se logra del estrecho de Rande o la ensenada de San Simón, así como el bosque con pinos y eucaliptos que la flanquea durante buena parte del itinerario. Las fuentes que se distribuyen a lo largo de la ruta ayudan al senderista a refrescarse. En 2009 la Mancomunidad de Montes Veciñais en Man Común de Redondela, con fondos del programa europeo de desarrollo rural Proder II, acondicionó la parte del trayecto que transcurre por las parroquias de Chapela, Trasmañó, Cedeira, Santo Estevo de Negros, Cabeiro, Vilar de Infesta, Saxamonde, Quintera y Reboreda, en total cerca de 23 kilómetros. En el primer tramo del recorrido hay además varios furanchos que permiten a los senderistas acompañar las vistas, la experiencia y el ejercicio con la degustación del mejor vino de casa.

Baza para el turismo

La facilidad del recorrido anima a numerosas personas a acudir a la senda en familia, con perros, en bici.... Desde la web de Turismo de Vigo se recomiendan los 13 primeros kilómetros que transcurren entre el inicio, en la calle Cantabria, hasta la carretera que comunica Redondela con el aeropuerto de Peinador, como una primera aproximación.

En marzo el Concello avanzó su intención de mejorar la senda para poner en valor el itinerario y mejorar sus tres primeros kilómetros. Entre las novedades que planteó Praza do Rei, destacan, por ejemplo, la colocación de marquesinas con planos de todo el itinerario, entre Vigo y la presa de Eiras, en Fornelos, o la instalación de hitos. Señales verticales de madera tratada y pintada de verde y amarillo indicarán además el itinerario en cada cruce de la ruta para evitar que los senderistas se desorienten durante la caminata.