En la ciudad norteña italiana, también incluida en los destinos internacionales de Ryanair para 2017, hay sitios de visita inexcusable. Como la Plaza del Duomo, la catedral de Milán o la Galleria Vittorio Emanuele II; o el Teatro de la Scala, con la ópera donde los tenores más afamados del planeta como Verdi cosecharon su mayor éxito. Pero si por algo se conoce a Milán, más que por su cercanía a los Alpes, es por su condición de capital de la moda y en cierto sentido dicen que sus habitantes parecen como si vivieran obsesionados por comprar en las tiendas de las principales marcas que abarrotan sus calles. De sus alrededores las guías aconsejan la excursión al lago de Como, lugar mágico, o la visita a las localidades medievales de Bérgamo o Brescia.