El alcalde de Vigo, Abel Caballero, no descarta que el gobierno local pueda promover la construcción de un aparcamiento público en las inmediaciones del Álvaro Cunqueiro. Tras reunirse con la junta de personal del área sanitaria, el regidor garantizó que hará "todo lo que haya que hacer para que todos tengan la mejor situación posible en la utilización del hospital", ya sean "enfermos, familiares, usuarios o trabajadores". En todo caso, tampoco lo confirma y exige a la Xunta que "declare gratuitas hoy mismo" las 3.000 plazas de aparcamiento construidas en el complejo de Beade.

Caballero expresó su apoyo a las demandas de los representantes de los trabajadores y destacó que coinciden en su reclamación de "un hospital público, de más de 1.400 camas, con un laboratorio central, con dotaciones, con un aparcamiento gratuito y, por tanto, con todo lo que un hospital público tiene que tener". Comparten su posición a favor de la "reversión" de la concesión.

El regidor entiende que, tras la masiva manifestación del 3 de septiembre, la Xunta debe adoptar decisiones "inmediatas". La primera, la del aparcamiento, y la siguiente, paralizar la instalación del laboratorio central en el Meixoeiro y recuperar el proyecto de implantarlo en el Álvaro Cunqueiro. Anunció que se creará un grupo de trabajo con miembros de la junta de personal para ajustar los horarios y rutas de las líneas al nuevo hospital.

Por su parte, el presidente de la junta de personal, Ángel Cameselle, apuntó a la Xunta como responsable en esta problemática del parking. "Se haga lo que se haga, la concesionaria va a exigir los millones de euros que esperaba recaudar año por año", argumenta. "Partiendo de que la responsabilidad es de la Xunta, que construyó un hospital público-privado, queremos que a muy corto plazo los ciudadanos de Vigo puedan aparcar sin ser gravoso en el Álvaro Cunqueiro", defendió, tras recordar que el Concello no es el único que dispone de terrenos en el entorno del hospital. "No entendemos más que por un tema económico que la consellería [de Sanidade] no desvalle la zona cerradas y la gente pueda dejar ya su coche", apostilló.

Con respecto a las muestras de la mujer fallecida en el Álvaro Cunqueiro con aspergillus, que inspectores sanitarios se llevaron del Chuvi en el seno de una "investigación reservada", la junta de personal sugiere que su envío a Santiago responde a un interés de tener el asunto "más controlado políticamente".