La Corporación se implicó ayer en el drama de las decenas de miles de refugiados que llegan a Europa arriesgando sus vidas con un acuerdo institucional consensuado entre los tres partidos en el que se ofrece a colaborar en su atención. El Concello se sumará a la Rede de Ciudades-Refugio, "preparando dispositivos de acogida -reza la declaración conjunta- e invitando a los ciudadanos a colaborar en la medida de sus posibilidades en la atención y ayuda a las personas refugiadas, desarrollando además una mesa de apoyo para realizar un trabajo estable y permanente con diferentes medidas de apoyo".

Los grupos urgen al Gobierno central a diseñar un plan de acogida que contemple plazas dignas, posibilidades de escolarización para los menores, y atención sanitaria y social en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Igualmente la Corporación insta al Ejecutivo central a apoyar todas las vías diplomáticas de pacificación de los países en conflicto, trabajar en una política integral de inmigración en la UE, aceptar a los solicitantes propuestos por la Comisión Europea, desarrollar una campaña de sensibilización a la población, y aprobar lo antes posible el reglamento de la Ley 12/2009 reguladora del derecho de asilo.

"No podemos aceptar como inevitables las tragedias humanas que viven los refugiados, ni las muertes de personas que se ahogan en el Mediterráneo o se asfixian encerradas en un camión. No los podemos dejar a merced de traficantes de personas sin escrúpulos, porque si no tienen otra alternativa a su huida seguirán arriesgando sus vidas", recoge la declaración institucional. Marea presentó previamente una moción al respecto pero la retiró al promoverse el acuerdo conjunto.