Más de 2.500 vehículos transportados desde junio. El balance de la conexión marítima entre Vigo y México explotada por la naviera Höegh Autoliners supera las previsiones. Representa ya el 35% de las 7.000 unidades fabricadas en Balaídos que la compañía noruega estimaba embarcar al año en virtud del contrato firmado con Gefco, el operador logístico de PSA. Un volumen que ha conseguido transportar en solo tres meses, truncados por el parón industrial de agosto, y cuatro embarques, uno de ellos extra. "El tema va bien, mejor de lo previsto", revela el director de Höegh Autoliners en España, Iñaki Echeverría. Con todo prefiere esperar a que fructifiquen los intensos contactos comerciales que mantiene con empresas para captar más mercancía rodada antes de avanzar en la incorporación de la segunda escala mensual en Vigo que, como reconoce, ya está encima de la mesa.
"Estamos planteándonos incorporar un barco más a la rotación de la línea, lo que posibilitaría contemplar esa segunda escala", precisa Echevarría. En la práctica ya se produjo a finales del pasado mes, cuando uno de sus buques paró en Bouzas unas horas para cargar otros 405 vehículos acumulados en la explanada desde la anterior escala, el 3 de agosto. Sin embargo, el portavoz de la armadora en España asegura que fue una "parada puntual".
En la actualidad, el servicio "Europa-Caribe-Estados Unidos" de Höegh funciona con la rotación del Höegh Singapore, Höegh Maputo y Höegh Masan. Los tres atracaron ya en Bouzas en un itinerario de 45 días que sigue a continuación por Tánger (Marruecos); las islas de Guadalupe, Martinica y Guayana Francesa en el Caribe; Veracruz (México), Jacksonville y Baltimore (Estados Unidos); y desde de aquí hasta Bremerhaven (Alemania), donde nace la línea. Gracias a este variado periplo los coches Made in Vigo, como los Citroën Elysée, C4 Picasso y Berlingo, y los Peugeot 301 y Partner están llegando a destinos hasta ahora sin conexión desde Bouzas.
Haz click para ampliar el gráfico
Incluido Cuba. De los 764 vehículos que el Höegh Maputo embarcó el 21 de julio en la terminal viguesa, 567 viajaban para el mercado cubano. No es la primera vez que la planta de PSA envía mercancía a este archipiélago pero lo hacía a través de Le Havre (Francia). "Sí es la primera vez que se cargan y declaran vehículos en Vigo y fabricados aquí con destino Cuba", matizan fuentes portuarias. Sin embargo, la reciente reconciliación entre Estados Unidos y Cuba parece aún muy verde como para permitir el libre tránsito marítimo de las mercancías. Para sortear las actuales restricciones de índole política, el barco de Höegh transborda los vehículos de PSA a otro de menor tamaño en la Guyana Francesa para enviarlos desde aquí a La Habana. "El buque que escala en Vigo no puede ir directo a Cuba. De atracar allí debería permanecer creo que un mínimo de seis meses", apunta Echeverría.
Que el origen del contrato de Höegh con Gefco señale como destino principal México no significa que las unidades que distribuyen sus barcos por islas caribeñas estén abocadas a un volumen residual. De hecho, del total de las transportadas desde junio, en concreto, 2.521, casi el 40% quedaron en esos paradisíacos archipiélagos.
Para el portavoz de la naviera, la potencialidad de esta ruta está "por desarrollar". Convencido de que puede ser muy últil para industrias de Vigo y su área, prepara con la Autoridad Portuaria un encuentro para octubre con representantes de la clase en empresarial.
