En torno a las siete de la tarde del domingo 14 de marzo de este año entraron en la nave de Dalot, ubicada en el polígono Montefaquiña (Mos), dos individuos. Sabían que podrían ser grabados por las cámaras y aun así los "vampiros" siguieron con el golpe. Tal vez tuvieran conocimientos del alcance de esos equipos de vigilancia y calcularon que a una determinada distancia difícilmente podrían identificarlos. Y así fue. Se ve a dos hombres provistos de mangueras y garrafas manipulando el depósito, pero demasiado lejos y difusos como para descifrar su rostro. La única prueba: los tanques sin gota de gasóleo.