La Policía Local de Vigo detuvo la pasada madrugada a un vigués de 32 años, L.M.V., que supuestamente viene acosando desde hace cuatro meses a la camarera de una cafetería de la calle Travesía de Vigo en donde, por este motivo, tiene prohibida la entrada. "Está obsesionado con ella", relatan personas próximas a la víctima.

El último episodio habría ocurrido la pasada madrugada, cuando el joven insistió en entrar en el local a pesar de las advertencias de la propia trabajadora, de clientes y de una dotación policial que fue allí. Cuando llegó una segunda patrulla, los agentes ya se encontraron al hombre en la calle con una mano ensangrentada y la puerta de cristal del bar fracturada, mientras que otra persona le impedía acceder. Clientes que estaban dentro habían conseguido que saliera del local.

"Dejadme entrar, es mi mujer, es mía y quiero estar con ella", gritó el arrestado a los policías, a quienes supuestamente intentó asestar patadas. Los agentes, que trataron de explicarle que la víctima no era su pareja y que ella ya lo había denunciado por su conducta, acabaron deteniéndolo por el estado de agresividad que presentaba.

La trabajadora acosada relató a los agentes que ya denunció a L.M.V. otras veces y que su sola presencia en la cafetería le causa miedo y episodios de ansiedad. La mujer detalló que en una ocasión la estuvo mirando fijamente durante cuatro horas sin decirle nada, y que además de en la cafetería la sigue por otros lugares que ella frecuenta, lo que le obligó a cambiar de rutina de vida. El arrestado quedó ayer en libertad en sede policial.