El Hospital Álvaro Cunqueiro empieza a coger ritmo con la llegada mañana de 465 pacientes de Ginecología, Pediatría, Neurología y Otorrino y el traslado a Beade de los servicios de Admisión y Atención al Paciente. Por ahora el acceso está restringido al zócalo ambulatorio y el Sergas ha establecido un código de colores en el recinto para orientar a los primeros usuarios. Los que acudan al área Materno-Infantil deben aparcar en las plazas del parking de color naranja y tomar el ascensor con la letra J. Las consultas de Neurología y Otorrinolaringología se distinguen con un verde claro y se corresponden con la letra K del módulo de comunicaciones vertical, mientras que el violeta en el aparcamiento identifica el área de Anestesia, Nefrología y Diálisis y sus usuarios deben subir por el ascensor L.
La gente que llegue con las lanzaderas de Vitrasa que empiezan a funcionar mañana a las 07.20 horas desde Praza América deben buscar el mismo código de colores una vez que entren a la sala de espera general de la zona de consultas, donde deben meter su tarjeta sanitaria en un quiosco que le indicará la subzona a la que debe dirigirse y donde podrá seguir por pantalla la llamada del espacialista. Habrá todavía personal de información con sus característicos "chalecos azules" para orientar a quienes tengan la banda magnética de la tarjeta estropeada.
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De la zona que por ahora está abierta al público, la que más llama la atención es el área de consultas pediátricas, que cuenta con un acceso independiente y una sala de espera propia decorada con enormes lienzos con dibujos infantiles y en la que se ha habiltiado una zona con mobiliario adaptado y juegos para los niños. "El objetivo es minimizar el impacto del entorno hospitalario", explicaban ayer el director de Procesos sin Ingreso y Urgencias de la EOXI de Vigo, Javier Caramés, y la directora de Procesos de Enfermería, Pilar Reza.
El día 6 arranca también el transporte intercentros de personal con seis rutas diarias y por ahora el parking sigue siendo gratuito.
Mañana se incorporan otros 70 profesionales entre facultativos, enfermeras y auxiliares y el mobiliario de los cuatro nuevos servicios acabó de trasladarse el viernes. Ayer aún eran visibles en los aparatos reciclados del Xeral, Meixoeiro y los centros de especialidades de A Doblada y Coia las pegatinas amarillas que se colocaron para evitar extravíos en el traslado en ambulancias. Como novedad, todas las camillas de las consultas son ahora eléctricas y las de Ginecología tienen baño individual. Para la próxima semana están citados en Beade 2.203 pacientes. El jefe de Otorrino, Carmelo Santidrián, explicó ayer que solo ellos atienden en consulta cada semana a 500 pacientes y que están organizando la vía rápida de cáncer de laringe.
