| Apagar fuegos es su principal cometido pero, por supuesto, no el único. El tener que estar 24 horas en alerta con todos los equipos y herramientas operativas y en perfectas condiciones les obliga muchas veces a tener que ser ellos mismos quienes las reparen. Para ello disponen de un taller en la planta baja, junto a la cochera. De hecho, esta semana se han puesto incluso a preparar varios pivotes amarillos (en la imagen) para colocar en los accesos al parque y evitar colisionar con los camiones contra los marcos de los nuevos portalones. Igualmente, y al tener turnos tan largos, sus destrezas se extienden a la cocina. "El ejercicio físico es básico, pero la buena alimentación también", presumen.
