El Hospital Povisa, en su línea de apoyo a los atletas locales con discapacidad, ha renovado su contrato de patrocinio con la paratriatleta Susana Rodríguez Gacio hasta el final del presente año y ha firmado otro con el proyecto Discamino. En 2015, la meta de la primera será clasificarse para el que sería su debut olímpico, Río de Janeiro 2016. Los integrantes del segundo reunirán a personas con discapacidad física y psíquica en dos peregrinajes a Santiago en triciclo-tándem, uno por la ruta de la Plata y otro, por el Camino Francés.

El consejero delegado de Povisa, José Bernardo Silveira, destacó el "esfuerzo, la dedicación, la voluntad y el trabajo en equipo" de estos deportistas y explicó que su patrocinio "no es solo una apuesta por ellos, como deportistas que son, sino también un intento por transmitir a la sociedad los valores que representan".

Rodríguez Gacio, con dos medallas de oro (2012 y 2014) y una de plata (2013) en el Campeonato del Mundo de Paratriatlón, agradeció a Povisa que, por segundo año consecutivo, se convierta en su "principal patrocinador" porque "a día de hoy no es muy fácil encontrar empresas que se animen". Este año, su meta será clasificarse para los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro 2016, mientras prepara su especialidad en Medicina. Susana nació con albisnismo, una enfermedad genética que, entre otras cosas, le ha provocado una ceguera casi total. Algo que no ha impedido diplomarse en Fisioterapia y licenciarse en Medicina, además de sus logros como deportista.

El proyecto Discamino, que nació del interés del sordociego Gerardo Fernández por superarse haciendo deporte y del de Javier Pitillas por ayudarle a conseguirlo, reúne a personas con discapacidad para realizar el Camino de Santiago en tándems adaptados. Pitillas explicó ayer que, con la ayuda de Povisa, han podido comprar un triciclo nuevo y un cambio de 14 velocidades para otro. Este año se han marcado dos retos. En uno de ellos recorrerán la Ruta de la Plata -desde Sevilla a Santiago- con cinco deportistas con discapacidad. Cada uno, ayudado por un instructor, hará 40 de los 60 kilómetros de cada etapa. El segundo tiene como protagonista a una pareja de afectado por parálisis cerebral, Diana Comesaña y David Gil, que peregrinarán por el Camino Francés.