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Cuatro años después de arrancar el plan de liquidación

La fábrica de Bernardo Alfageme en Bouzas sale a subasta por 35 millones

El lote consiste en una parcela de 14.300 m² donde están la factoría de la antigua conservera, almacenes y dos casas -La puja se celebrará a los 4 años de arrancar el plan de liquidación

La fábrica de Bernardo Alfageme en Bouzas sale a subasta por 35 millones

En el largo y complejo proceso de liquidación de los bienes de Bernardo Alfageme, que se prolonga ya desde hace casi cuatro años, faltaba por decidir el destino de la joya de la antigua conservera, la factoría ubicada en el barrio vigués de Bouzas. Y esta incógnita podría desvelarse el próximo 7 de mayo: ese es el día en el que el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, ha fijado la subasta pública de esta emblemática fábrica de conservas ineludiblemente ligada a la historia industrial de la ciudad olívica, que ocupa un amplio solar entre Tomás Alonso y Beiramar. La valoración económica, tal y como figura en el inventario de la masa activa, ha sido fijada en más de 35 millones de euros.

Tras los infructuosos intentos de la administración concursal de vender la factoría, el juzgado, a instancia de ésta, acaba de dictar un edicto en el que acuerda sacarla a subasta. En una céntrica parcela que ocupa la superficie total de 14.355 metros cuadrados, las instalaciones, según describe el documento judicial, incluyen en primer lugar la fábrica propiamente dicha, de unos 4.000 m² y compuesta de planta baja y algunas dependencias en lo alto (que estaban destinadas a oficinas y a vivienda del guarda). Además de la factoría, en el lote se incluyen tres almacenes que ocupan más de 3.400 m², así como una casa-chalé de 140 m² (originariamente era la vivienda familiar), otra casa de 120 m² y un garaje de unos 70 m². El resto de la finca está formada, se especifica, por "jardines, calles y patios". La valoración establecida para la subasta asciende a un total de 35.618.895 euros.

Pleno dominio

El bien, del que Bernardo Alfageme S.A. es titular de la totalidad del pleno dominio de la finca, tiene una serie de cargas -tres hipotecas formalizadas entre mayo de 2008 y junio 2009 así como dos embargos- que también se especifican en el edicto. Así, existe una primera hipoteca a favor de las entidades prestamistas -Abanca (42,86%), Banco Popular (28,57%) y Banco de Galicia (28,57%)-, que la aceptan para garantizar el íntegro y completo cumplimiento de la totalidad de las obligaciones establecidas en el contrato, por importes que suman 14,7 millones. Hay una segunda hipoteca a favor del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), organismo dependiente de la Xunta, para responder de otros 1,3 millones y una tercera a favor del Banco Popular respondiendo de hasta un máximo de 14 millones de euros de principal, así como, entre otros conceptos, de 2,1 millones para costas y gastos.

En cuanto a los embargos que también constan como cargas, ambos tramitados en procesos que llevaron sendos juzgados de Primera Instancia de Vigo, uno de ellos es a favor de la empresa Crown Embalajes España S.L.U. en reclamación de casi 400.000 euros, y el segundo es a favor de Gráficas y Distribuciones Abalo S.L., en este caso por una cantidad ya mucho inferior: 1.047 euros.

Como condición para tomar parte en la subasta los interesados deberán efectuar el depósito previo del 20% del valor del bien, cantidad que en este caso asciende a 7,1 millones de euros. Los licitadores tendrán que presentar el resguardo acreditativo de haber consignado este dinero en la cuenta del juzgado o de que prestaron aval bancario por dicho importe. En todo caso, estarán dispensados de la obligación de consignar aquellos acreedores que ostenten créditos con privilegio especial sobre el bien objeto del proceso.

La puja de la factoría proyectada en 1928 por el arquitecto vigués Manuel Gómez Román es la última que realizará el juzgado de lo Mercantil en relación con Bernardo Alfageme, la que fuera una de las firmas conserveras más importantes de la historia de Galicia. Tras la entrada en concurso de acreedores en 2010, el plan de liquidación se aprobaba un año después, el 24 de mayo de 2011, aunque meses después, a raíz de un recurso de apelación ante la Audiencia, se introdujeron algunas modificaciones. En este largo proceso el concurso de Alfageme se declaró culpable, algo que ratificó el Tribunal Supremo en 2013, imponiendo a Gustavo Lago, familia expropietaria de la conservera, la devolución de 11,8 millones a la empresa.

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